Motorola se desploma en Bolsa al rebajar sus previsiones
La guerra de precios ha sido la culpable. El abaratamiento de los terminales para elevar las ventas en mercados emergentes y para apuntalarlas en los más desarrollados está provocando una caída de la rentabilidad y sus resultados en el aumento de la distribución de terminales tampoco está del todo comprobados. Así lo ha reconocido Motorola, que el viernes provocó una verdadera sacudida en sus acciones que se extendió entre sus principales rivales.
El jueves por la noche, ya con el mercado cerrado, el primer ejecutivo del fabricante estadounidense de teléfonos móviles adelantó que Motorola estaba 'muy descontenta' con el cuarto trimestre de 2006. Y este descontento se tradujo en una revisión a la baja de las previsiones de ingresos y de beneficio por acción para los tres últimos meses del año pasado. La facturación se quedará entre 11.600 y 11.800 millones de dólares, por debajo de los 12.100 millones previstos en octubre. Será el menor crecimiento en seis trimestres y el segundo consecutivo que incumple las previsiones del mercado.
El anuncio de Motorola corrió el viernes como la pólvora. En Europa, sacudió a su principal rival, Nokia, que cayó un 4,15%. En la Bolsa de Nueva York, Motorola arrancó con un desplome del 12%, el mayor en cuatro años, aunque al cierre logró reducir los daños y moderó las pérdidas con una bajada del 7,8%.