Los planes de Bolsa acaban el año con subidas medias del 18%
La recta final del año está dejando a los planes de pensiones escasos márgenes para corregir las tendencias que se vienen observando desde el otoño: satisfactorias rentabilidades en los de renta variable y mediocres ganancias, casi siempre por debajo de la inflación (a pesar de la moderación de esta en los últimos meses), en los de renta fija y garantizados, que son mayoría.
Los planes que invierten en activos bursátiles son, como es lógico, los más rentables y se mueven actualmente en el 18% de ganancia media anual, aunque algunos han superado sin problemas la barrera del 30% gracias a una orientación de sus inversiones más próxima a la renta variable española, mientras los fondos bursátiles de ámbito más global han debido conformarse con rendimientos bastante más modestos e incluso afrontar en algunos casos pérdidas, como en los fondos de renta variable que estarán especializados en el mercado japonés.
La peor parte se le llevan este año los planes que actúan en la renta fija a medio y largo plazo, ya que las subidas de los tipos de interés, en especial a largo plazo, han desarbolado las expectativas de beneficio. Las rentabilidades se mueven en un término medio de apenas el 0,3% en el año, aunque hay un buen número de planes de este tipo que se mueven en la zona de pérdidas.
Esta misma semana los tipos a largo plazo han experimentado un estirón alcista hasta acercarse a la zona del 4%, en la que muchas carteras de planes de pensiones tienen ya el listón de las pérdidas. El empeoramiento de los tipos a largo plazo se dejará notar más aún previsiblemente durante la semana final del año. En las demás categorías relacionadas con la renta fija, los planes a corto plazo terminan el año ligeramente por encima del 1%, algo mejor que los de medio y largo plazo, pero desde luego muy lejos de lo que desearían los partícipes que quieren ver sus inversiones ganando por lo menos la carrera a la inflación.