La tarifa doméstica de la luz subirá una media del 2,8% en 2007 y se revisará trimestralmente
El ministro de Industria, Turismo y Comercio, Joan Clos, ha anunciado hoy en el Congreso de los Diputados que la tarifa eléctrica para los consumidores domésticos subirá, el próximo año, en torno al IPC, lo que supone una media del 2,8%, y se revisarán cada tres meses.
Las tarifas eléctricas se revisarán de forma automática cada tres meses, de acuerdo con la evolución de los costes de generación, a partir del segundo semestre del próximo año, tal como se hace ya con las del gas natural, anunció hoy en el Congreso el ministro de Industria, Joan Clos.
La revisión, que podrá ser al alza o a la baja y no dependerá de la decisión del Gobierno, afectará sólo a la parte de la tarifa ligada a los costes de generación, que representan en torno al 65% del total. Clos explicó, en una conferencia de prensa en la Cámara Baja, que habrá topes, tanto por arriba como por abajo, para evitar variaciones sustanciales.
El nuevo sistema entrará en vigor cuando empiece a funcionar, en la segunda mitad del año, el mercado de subastas de energía eléctrica a plazo entre productores y distribuidores, cuyo marco normativo estudia ahora la Comisión Nacional de la Energía (CNE).
Según Clos, el mercado de subastas a plazo empezará a funcionar en el primer trimestre, aunque se concederán un par de trimestres para indexar la tarifa a su evolución. A partir de ese momento, explicó, "la parte de generación de la tarifa estará indexada al precio de la energía". El titular de Industria recordó que este sistema de revisión automática ya se emplea en otros países europeos y en España en el caso del gas natural.
Subidas "moderadas"
En cuanto a las subidas tarifarias propuestas para el próximo año, Clos dijo que son "muy moderadas" y destacó la introducción de mecanismos de ahorro energético en la tarifa. Como novedad, se establecerán tramos de consumo, con precios más favorables para los más reducidos.
Además, se diferenciarán dos tramos horarios, uno de bajo consumo, más barato, entre las nueve de la noche y las once de la mañana, y otro de alto consumo, más caro, de once de la mañana a nueve de la noche. Para que los usuarios puedan modular su consumo, se introducirán contadores electrónicos, que permitirán controlar las potencias y los horarios de consumo.
A partir del 1 de julio, todas las viviendas nuevas deberán contar con ese tipo de contadores. Según Clos, el uso de estos mecanismos permitirán ahorros de entre el 8 y el 10%.