Una luz al final del Eurotunnel
Los acreedores del grupo franco-británico Eurotunnel, que explota el túnel ferroviario bajo el Canal de la Mancha, aprobaron ayer un plan de reestructuración de la deuda de 9.100 millones, salvando por ahora al grupo de la quiebra.
El acuerdo aprobado ayer comenzó a gestarse después de que en abril de 2004, un grupo de accionistas dirigido por el fundador de Nouvelles Frontières, Jacques Maillot, apoyado por la asociación de pequeños accionistas, dejara la dirección de Eurotunnel. No estaban de acuerdo con la gestión del moribundo grupo franco-británico creado por un acuerdo político entre François Mitterrand y Margaret Thatcher.
Dos años después, aquel arranque de capitalismo populista demostró no haber tenido éxito. Tras un infructuoso plan de salvamento de la empresa, ahogada por una deuda de 9.100 millones de euros, el presidente de Eurotunnel, Jacques Gounon, recurrió a la justicia in extremis para evitar lo peor. Aquel gesto daba a los acreedores un plazo para alcanzar un acuerdo sobre la financiación de la deuda y reflotar la empresa.
El pasado 26 de octubre, Gounon presentó 'el plan de la última oportunidad', previo apoyo del consejo de administración. La estrategia prevé la reducción de la deuda en un 54%, hasta 4.160 millones de euros a través de un préstamo bancario a 40 años financiado por los bancos Goldman Sachs y Deutsche Bank por un lado y Citigroup por otro. A cambio, los acreedores recibirán efectivo y obligaciones reembolsables en acciones sobre un periodo de tres años.
Un plan que permitirá reducir los intereses de la deuda a menos de 220 millones de euros al año, 2,5 veces menos que la carga actual. Los 800.000 accionistas individuales del grupo que hoy poseen el 100% del capital no tendrán más que el 13% en el peor de los casos, un nivel muy superior a lo que normalmente prevén las reestructuraciones de empresa al borde de la quiebra.
El plan supone 'el mejor equilibrio posible entre las exigencias de todas las partes. La cancelación masiva de la deuda permite despegar de nuevo con una base sólida y poder por fin desarrollarse', según explicó Jacques Gounon en aquel momento.
Ayer, los acreedores de Eurotunnel votaron a favor del plan de reestructuración propuesto por la dirección por 28 votos a favor de los 53 acreedores que cuenta la empresa, que tienen en sus manos el 72% de la deuda, rebasando así el mínimo exigido.
El voto de ayer deja en manos del Tribunal de Comercio de París, bajo cuya protección se encuentra el grupo franco-británico, el aval del plan de reestructuración y su refinanciación. El Tribunal de Comercio de París se reunirá en el mes de diciembre para analizar las consecuencias del voto de los acreedores.
Después, el paso lo marcarán los accionistas, muchos insatisfechos con las nuevas condiciones financieras propuestas por la dirección. La acción Eurotunnel, en la Bolsa de París desde 1987 con un valor de 5,34 euros, alcanzó 19,51 euros en mayo de 1989 antes de caer en picado. En mayo de 2006 el título quedó suspendido, siendo entonces su valor 0,44 euros.
Las últimas etapas del salvamento
15 de mayo de 2006, la acción de Eurotunnel queda suspendida en la Bolsa de París después de Londres ante una deuda colosal de 9.100 millones de euros.31 de mayo de 2006, la empresa firma con sus principales acreedores un acuerdo de refinanciación de la deuda, que prevé la cancelación de la mitad de su montante.13 de julio de 2006, fracaso en las negociaciones entre los acreedores y la dirección. El presidente de Eurotunnel Jacques Gounon pide acogerse al proceso de salvaguarda ante el Tribunal de Comercio de París.26 de octubre de 2006, Gounon detalla las propuestas de refinanciación a sus acreedores.22 de noviembre, la aseguradora estadounidense MBIA y el Banco Europeo de Inversión, principales acreedores, dicen apoyar el plan de rescate.27 de noviembre de 2006, 28 acreedores de un total de 53 que representan el 72% de la deuda votan a favor de la reestructuración propuesta por la dirección.