Farmacias que recetan libros
Con el objetivo de acercar los libros y la lectura a los ciudadanos, la Junta de Extremadura ha puesto en marcha Recetas de Lectura, un programa a partir del cual las 677 farmacias de esa región cuentan con un lote de 350 recetas, cada una para fomentar el ejercicio de la lectura entre sus clientes. Las recetas tienen forma de prospecto de medicamento, están ubicadas en un expositor de cartón y se ofrecen a los usuarios de farmacia cuando acuden a comprar sus medicamentos.
Escritas en un tono sencillo, las recetas ofrecen recomendaciones de lectura de 40 títulos diferentes, seleccionados entre obras de literatura infantil, juvenil y de adultos, de géneros especialmente recomendados para fomentar la lectura: novela, cuento y ensayo. Contienen, además, un pequeño fragmento del título recomendado. En total, la Junta distribuirá 300.000 libros hasta el fin de la campaña.
El proyecto pretende relacionar el espacio público de bienestar de las farmacias con el espacio íntimo de bienestar que representa la lectura. A la hora de diseñarlo, la Junta tuvo en cuenta principalmente dos datos: la baja tasa de lectura de esa región y que los colectivos que aparecen como deficitarios en dichos índices son los que acuden con mayor frecuencia a las farmacias: personas mayores o con enfermedades crónicas, madres y padres con poco tiempo para la lectura y, sobre todo, personas que están alejadas de los canales de información del libro, pero que establecen su relación con la lectura por otras vías, como la prensa gratuita y las revistas.
Luis Sáez Delgado, coordinador del Plan de Fomento de la Lectura de la Junta de Extremadura, explica que la iniciativa está relacionada con el programa Biblioteca de Cabecera, que fomenta también la lectura, pero entre quienes pasan algún día ingresados en alguno uno de los once hospitales públicos de la región.
'La idea es incrementar el índice de lectura de Extremadura, y hacer cotidianos los libros; acercar la lectura a la gente', asegura Sáez. 'Creemos que las personas que acuden más a las farmacias se encuentran en una situación ideal para leer', agrega. Y anticipa de alguna forma lo que vendrá: 'está lleno de superficies donde puede estar la literatura, como los manteles y las servilletas'. La Junta consideró conveniente desarrollar la campaña durante el último trimestre del año, para que acompañe el inicio del curso académico y finalice coincidiendo con las Navidades, un momento especial para la lectura, tanto por la habitual compra de libros que se realiza para esa fecha como por la frecuencia social de la conversación sobre el tema o las visitas a la biblioteca.
A finales de octubre, se efectuó un primer envío a cada farmacia de 20 recetas y el expositor, para que estén a disposición de los usuarios en noviembre; a fines de este mes habrá un segundo envío de recetas, que estarán disponibles al público en diciembre.
Obras de calidad y atractiva
Cada lote de recetas distribuido en las farmacias extremeñas contiene diferentes obras recomendadas de literatura española -y entre ésta, de la escrita en Extremadura-, así como grandes clásicos de la literatura universal y de autores más contemporáneos, como Paul Auster y Stephan Zweig.La Junta buscó hacer equilibrio entre la calidad de los textos escogidos y la facilidad con que éstos podían atraer a un público no lector. Así, los habitantes de la región, al ir por sus medicamentos, pueden encontrar recomendaciones para leer desde La muerte de Iván Ilich, de León Tolstoi, y La isla del tesoro, de Robert L. Stevenson, hasta El guardián entre el centeno, de J. D. Salinger, y El libro de las ilusiones, de Paul Auster.Las recetas, disponibles para los usuarios de farmacia como se ofrecen otro tipo de folletos publicitarios o de consejos de salud, tienen colores diferentes, según se trate de recomendaciones para adultos, jóvenes o niños.