La CMT pide una rebaja superior al 20% en los precios del ADSL
La CMT lleva tiempo criticando el sobreprecio que se paga por el ADSL en España en comparación con Europa. Y ha tomado medidas frente a ello. El regulador ha propuesto a los operadores una rebaja que va desde el 20% al 55% en el precio que cobra Telefónica a sus rivales por alquilarles el ADSL que luego se pone a disposición de los clientes. La iniciativa tiene carácter prioritario, porque el objetivo es avivar la campaña de Navidad, pero los operadores lo ven complicado.
El regulador de las telecomunicaciones, la CMT, no tiene competencia para fijar los precios que se cobran a los clientes por el ADSL. Se trata de un mercado liberalizado en el que los operadores ponen sus tarifas sin encomendarse más que al éxito comercial. Pero la comisión sí tiene potestad para intervenir en los precios mayoristas, que son los que Telefónica cobra a sus rivales por alquilarles el ADSL. La esperanza de la CMT es que los competidores del ex monopolio trasladen cualquier reducción a las tarifas finales, de forma que el beneficio llegue al usuario.
Todo ello porque, según los estudios internos del regulador, el ADSL en España es un 20% más caro que la media europea, algo a lo que se quiere poner fin. Y, si es posible, antes de Navidad. La CMT ha dado total prioridad al tema para que se puedan ver los primeros efectos en la campaña navideña. Estas fechas son las más movidas en la venta de ADSL y el objetivo es que las operadoras lancen nuevas ofertas y más baratas, para que se anime la competencia.
A pesar de estos precedentes y de que la intención del regulador era conocida por todos, la rebaja que ha planteado ha sorprendido por su cuantía. Según la propuesta remitida a los afectados el pasado martes, los recortes van del 20% hasta el 55%, en una rebaja que podría beneficiar a más de 625.000 clientes actuales y los potenciales que se puedan captarse gracias a ella.
La modalidad de 1 mega podría costar menos de 20 euros si las operadoras beneficiadas trasladan la rebaja a los clientes finales
La modalidad más popular entre las que alquila Telefónica es el ADSL a 1 mega de velocidad, porque es el de precio más reducido y porque para dar capacidades más altas -los famosos 20 megas- las operadoras alternativas usan su propia red. La rebaja en ese caso ronda el 20% -lo que podría suponer, de trasladarse al usurario, unos precios al cliente final por debajo de los 20 euros-, en un porcentaje que va aumentando según se gana velocidad.
Estas rebajas no son arbitrarias, sino que proceden del estudio que ha hecho la CMT para que estos precios reflejen el coste que tiene el servicio para Telefónica, algo que ahora no sucede.
Otra iniciativa importante de la CMT ha sido regular el ADSL IP, el que se produce sobre una red de nueva tecnología y que permite a las telefónicas dar servicio en toda España con un solo punto de interconexión a la red del ex monopolio. Hasta ahora, los precios eran libres, pero en la propuesta de la CMT se determinan unos nuevos valores, también con sustanciales rebajas.
Estas modalidades de ADSL son las que usan las operadoras para lanzar ofertas nacionales gracias al alquiler del producto a Telefónica. Mientras usan estos servicios, la mayoría de ellas -Orange, Ya.com, Jazztel...- van desplegando su propia infraestructura en las centrales del ex monopolio. Con esta red pueden dar las ofertas a velocidades supersónicas en las que incluyen televisión y voz, con unos precios de alquiler de las centrales que la CMT rebajó en septiembre. Así, su estrategia es captar primero a los clientes con el ADSL alquilado a Telefónica y luego ir pasándolos a su propia infraestructura a medida que la despliegan.
Por ello, algunas empresas del sector han criticado duramente la propuesta de la CMT, porque supone dar facilidades a las compañías que no invierten y penalizar al resto. Además, puesto que se trata de un precio mayorista, estas fuentes ponen en cuestión que los operadores trasladen al cliente final los nuevos precios y consideran que es muy posible que utilicen la rebaja para mejorar sus márgenes de beneficio.
Con la propuesta en la mano, las operadoras tienen ahora que presentar alegaciones. El plazo vence el próximo viernes 1 de diciembre. Y cuando estén las alegaciones, los consejeros de la CMT mantendrán reuniones individuales con los afectados. Luego la decisión tendrá que llevarse al consejo del regulador, que sacará la resolución final.
Puesto que la prioridad es que esta rebaja llegue antes de Navidad, la CMT quiere acelerar los trámites al máximo. Pero las telefónicas susceptibles de aplicar los nuevos precios no lo ven tan claro. 'Las campañas publicitarias para Navidad ya está decididas y las ofertas, preparadas, con los espacios en los medios comprados porque son unas fechas en las que hay que hacer todo con mucha antelación', explica una fuente del sector. 'Para lanzar una propuesta hay que realizar estudios técnicos y lo mismo para aplicar estos nuevos precios. No será nada fácil tenerlo listo para la campaña de Navidad', concluye.
Astel pierde el primer asalto en la pugna de los 3 megas
La patronal de las operadoras alternativas, Astel, ha perdido el primer asalto en su lucha contra el ADSL de 3 megas de Telefónica. Había pedido a la CMT la paralización cautelar de la oferta y el regulador se lo denegó en su consejo del jueves.Aunque la suspensión era un tema importante, el verdadero objetivo de Astel no es tanto impedir que Telefónica dé esta oferta como cambiar el diseño que le ha dado la CMT. Y es que para que el ex monopolio lanzara los 3 megas, el regulador le obligó a poner una oferta mayorista a disposición de sus rivales. El problema es que las especificaciones técnicas del alquiler son distintas a las del resto de las velocidades, porque se basa en la red ADSL IP de Telefónica. Aunque Astel reconoce que es la tecnología de futuro, por ahora esta opción plantea problemas y obliga a duplicar costes. Esto es lo que quiere cambiar Astel. La CMT lo tratará cuando entre en el fondo de la denuncia, en el segundo asalto.