Espírito Santo asegura a Garzón que no organizó una trama para blanquear dinero
Varios responsables del banco portugués Espírito Santo aseguraron ayer al juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón que la entidad no organizó ninguna trama societaria para blanquear dinero negro y evadir impuestos. Esa es la acusación que pesa sobre el banco luso y que desencadenó el pasado 2 de noviembre el registro de tres de sus oficinas en España.
En la misma actuación, bautizada como Operación suéter, se produjeron registros en el banco francés BNP Paribas, y en la aseguradora catalana Cahispa. Además, se decretó el embargo de 1.800 millones de euros depositados en varios bancos y cajas españoles. De esta suma 7,28 millones de euros están en la entidad portuguesa.
Los directivos del Espírito Santo declararon al juez que la operación que dio origen a la investigación sobre el banco nunca llegó a producirse. En dos ocasiones, responsables de Cahispa, acudieron a Lisboa para invertir 500 millones de euros en depósitos a plazos, pero el banco la descartó por motivos comerciales, según explicaron ayer a Garzón.