La cocina gallega conquista la ONU
El comedor vip de las Naciones Unidas se convirtió la semana pasada en un rincón gallego en pleno Manhattan. La Xunta de Galicia ha organizado un festival gastronómico que ha permitido a altos funcionarios, delegados, diplomáticos y hombres de negocios, degustar los platos y productos más representativos de Galicia. El objetivo: promocionar esta región como destino turístico, darla a conocer a través de sus productos e incentivar los contactos comerciales.
Ha sido una apuesta importante que se ha saldado con éxito. Desde luego, culinariamente (los resultados comerciales se verán a posteriori), si nos atenemos a las más de 400 comidas diarias -a razón de 25 dólares por persona- servidas en un bufé, con carta de vinos, en el que rotaban más de 20 especialidades diferentes cada día. Ocho conocidos cocineros gallegos (Jorge García, del Mesón de Alberto, Marcelo Tejedor, de Casa Marcelo, Pepe Solla, de Casa Solla, Xosé Torres, del Pepe Vieira, José Antonio Rivera, del Chef Rivera, Alfredo Castrelo, de El Refugio, Sacha Ormaechea, gallego afincado en Madrid con su restaurante homónimo, y los profesores del Centro Superior de Hostelería de Galicia, Roberto Walter y Carlos García Neira), apoyados por la labor como director de sala de Francisco Domínguez, del Martín Fierro, se desplazaron hasta Nueva York para preparar platos tradicionales. Empanadas, conservas cocinadas o al natural, caldo de grelos, sopa de millo (maíz), fideos con mejillones, callos con garbanzos, tortilla de Betanzos, ajadas, salpicones, arroz con sepia, merluza a la gallega, jarrete con cachelos, tarta de Santiago o las tradicionales cañitas rellenas de crema pastelera fueron alguno de los platos que desfilaron por el llamado 'comedor de delegados' de la ONU. Pero hubo tiempo también para celebrar dos exclusivos acontecimientos: el primero, una cena el miércoles en el lujoso See Grill, el restaurante del Rockefeller Center, a la que estaban invitados periodistas, touroperadores y distribuidores; el segundo una comida el jueves para 18 gurús de la prensa norteamericana, que comieron en una mesa en la cocina de las Naciones Unidas, lo que se llama Chef Table, cada vez más de moda, entre los más exclusivos.