La suspensión de pagos de Argentina costó 109.000 millones
La suspensión de pagos de Argentina en 2001 costó a los inversores y a los gobiernos alrededor de 140.000 millones de dólares (109.000 millones de euros), el 70% más que el valor nominal de los bonos impagos, según un informe preparado por un grupo que representa a tenedores de la deuda.
Aparte de los 81.000 millones de dólares en bonos impagos, hubo costos periféricos de más de 63.000 millones de dólares, entre ellos impuestos que habrían sido pagados sobre estas inversiones y pérdidas en el valor de las acciones de empresas que invirtieron en Argentina, según el informe preparado por este país para la American Task Force y presentado ayer en Roma.
En un plan de reestructuración de la deuda en 2005, Argentina ofreció compensar a los tenedores de bonos con un nuevo título de deuda por alrededor de 27% de sus activos iniciales, cerca de la mitad de la paga generalmente ofrecida en reestructuraciones gubernamentales, dice el informe.
El incumplimiento de la deuda y la subsiguiente devaluación de la moneda profundizaron la recesión económica de Argentina por un año antes de allanar el camino para una recuperación encabezada por las exportaciones.