Dura Auto se suma a la lista de grupos que quiebra en EE UU
El sector de componentes para la automoción recibió ayer otro mazazo. Dura Auto, fabricante que cuenta con tres plantas en España, entró ayer en procedimiento de ley concursal, con lo que se convierte en el quinto fabricante estadounidense de componentes que quiebra desde febrero de 2005.
La industria estadounidense de la automoción vuelve a estornudar y los efectos de la sacudida podrían llegar a España. Dura Automotive Systems se acogió ayer al llamado Capítulo 11, que es como se conoce en EE UU la entrada en procedimiento de concurso (antigua suspensión de pagos). La compañía se convierte así en el quinto fabricante estadounidense de la industria de componentes de que presenta la suspensión de pagos desde febrero de 2005.
La firma explicó ayer que esta decisión ha sido consecuencia de la disminución de la producción por parte de los dos principales fabricantes de EE UU, General Motors y Ford, y del alza del precio de las materias primas como el acero o el petróleo. Dura presentaba deudas de 1.730 millones de dólares (1.349 millones de euros) y activos valoradas en 1.990 millones de dólares (1.552 millones de euros). El pasado día 16, la compañía no pudo afrontar el pago de un pago de intereses de un préstamo de 17,3 millones de dólares.
La entrada en procedimiento concursal de Dura es el último susto a una industria que se está acostumbrando a las malas noticias. A las situaciones similares que vive competidores como Delphi, Tower Automotive, Collins & Aikman y Dana Corp. se unen las pérdidas de 5.772 millones cosechadas por GM, Ford y Chrysler en el tercer trimestre.
La situación de Dura podría tener repercusiones en España. La compañía cuenta con tres plantas, repartidas entre Valencia, Pamplona y Barcelona. La situación de esta filial tampoco es boyante. Dos de las plantas de la firma, las radicadas en Pamplona y Barcelona, están agrupadas en una empresa llamada Dura Automotive. Esta compañía sufrió unas pérdidas de 700.429 euros en el ejercicio, frente a unas ganancias de 865.323 euros en 2004. El informe de auditoría de Deloitte asegura que la compañía presenta un fondo de maniobra negativo y ha registrado pérdidas en ejercicios anteriores, aspectos 'indicativos de una incertidumbre sobre la capacidad de la sociedad de continuar su actividad'.
La tercera planta, la de Valencia, está constituida en una empresa independiente, según el registro mercantil. Tanto sus cuentas como las del holding en España no están disponibles.
Mitsubishi reduce sus números rojos
La japonesa Mitsubishi registró unas pérdidas netas de 16.100 millones de yenes (107,1 millones de euros) en los primeros seis meses de su año fiscal (abril a septiembre), lo que supone una reducción del 74,7% en comparación con el mismo periodo de 2005. El grupo japonés avanzó que espera cerrar con beneficios el presente ejercicio. En la imagen, el presidente Osamu Masuko, posa en Tokio ayer.