Abertis y Autostrade denuncian en la UE los obstáculos de Italia
La española Abertis y la italiana Autostrade cumplieron ayer su amenaza de tomar medidas contra Italia por vetar su fusión. Ambas compañías han notificado a Bruselas que el Gobierno de Romano Prodi no ha dado marcha atrás en todas sus trabas. En paralelo, han denunciado el veto ante un tribunal italiano.
El Ejecutivo italiano mantiene un obstáculo importante para la fusión entre los grupos de autopistas Abertis y Autostrade. En la enmienda que envió anteayer al Parlamento a un decreto de la ley de presupuestos va a imponer un contrato a las concesionarias que supone un cambio 'unilateral' que acaba con los vigentes y viola las normas comunitarias.
Las dos compañías que aspiran a crear el primer grupo mundial de autopistas no se lo esperaban. Contaban con que el gesto de la enmienda el mismo día que la UE daba a Roma diez días para justificar su veto levantaba todas las trabas. Ayer, el grupo controlado por ACS y La Caixa y su participada italiana notificaron a la UE que Italia no cambia significativamente el polémico decreto, según explicó la española en un comunicado.
Con este movimiento, intentan presionar más al Gobierno de Prodi para despejar la operación antes de fin de año para no tener que cambiar el proyecto aprobado en junio por las juntas de accionistas de ambas compañías. Para acrecentar la presión, Abertis y el grupo controlado por los Benetton han recurrido también a los tribunales, cumpliendo así la amenaza lanzada hace unos meses. Han presentado un recurso ante un tribunal administrativo de Lazio el veto que el Gobierno impuso a la operación a través del informe de la agencia estatal de carreteras (Anas) que se difundió el pasado agosto. Abertis, sin embargo, sigue abierta a negociar con Roma, según afirmó el consejero delegado, Salvador Alemany, en un comunicado.
El hecho es que Italia ha ido matizando su rechazo. De hecho, en la enmienda de anteayer levantó uno de los principales obstáculos al eliminar el límite del 5% de los derechos de voto de constructoras que sean accionistas de concesionarias. Esto afecta a ACS que tendrá el 12,5% en la fusionada.
Pero al imponer un cambio en los contratos vigentes pone en peligro el valor de Autostrade ya que los ingresos por tarifas pueden modificarse, admiten fuentes de Abertis. Aún hay tiempo para enmendarlo en el trámite parlamentario.
La acción del grupo de los Benetton cae un 3%
La nueva actitud de las compañías Abertis y Autostrade al apelar a la UE y llevar a los tribunales italianos el no del Gobierno de Prodi a su fusión penalizó ayer la acción del grupo de los Benetton. Autostrade cayó un 3% en Bolsa, hasta 22,53 euros. Mientras, Abertis descendió un 0,8%, hasta 21,02 euros.El trámite parlamentario que queda para el polémico decreto de Italia que impide la unión puede despejar la operación. En la coalición de centro-izquierda de Romano Prodi hay disensiones sobre el rechazo a la fusión. Y en el Gobierno también hay dos frentes entre los ministros.Mientras, el presidente de Autostrade, Gian Maria Gros-Pietro, expresó ayer sus dudas sobre si Abertis sigue interesada en la fusión después de los cambios 'inaceptables' en las concesiones. Pero confía en un acuerdo final.