Recoletos pierde 30 millones al integrar los costes de la adquisición por sus directivos
La opa lanzada por un grupo de directivos de Recoletos e inversores (fondos de capital riesgo y cajas de ahorro) a través de la sociedad Retos sobre el grupo de comunicación, y que acabó con su exclusión de Bolsa, ha pesado en las cuentas de la compañía, afectadas principalmente por costes y apuntes contables derivados de la operación, a lo que se suman los nuevos negocios, entre ellos el gratuito Qué!
Recoletos sufrió una pérdida en 2005 de 30,48 millones de euros, originada fundamentalmente por la amortización del fondo de comercio de la operación, así como de otros costes asociados y que, según fuentes oficiales de la empresa, han sido 'puntuales'. De no haberse contabilizado esos costes, el beneficio antes de impuestos hubiera aumentado un 14,5%.
La cifra de negocio del pasado ejercicio ascendió a 294 millones de euros, lo que supone un incremento del 7%. De esa cantidad, 111,93 millones proceden de publicidad, 142,6 de venta de ejemplares y 6,4 de conferencias. El resto queda dentro del epígrafe de 'otros'.
Recoletos explica que la absorción de las participaciones del grupo (80% de Pearson y 20% cotizado en Bolsa) produjeron un desfase contable de la fusión de 660,75 millones de euros (diferencias entre el coste de adquisición y su valor neto contable). El grupo, que amortiza linealmente ese fondo de comercio en un máximo de 20 años, destinó el pasado ejercicio 33 millones a su amortización, lo que originó una pérdida de explotación de 20,44 millones de euros.
Al apunte contable por amortización y los costes de la fusión se ha sumado el lanzamiento del diario gratuito Qué! -en el que Recoletos controla el 70% y Godó, el 30%- así como otros negocios considerados como nuevos desarrollos. El pasado ejercicio, la sociedad Factoría de Ficción (editora del gratuito) perdió 16,54 millones, según el informe.
De igual manera, de no haberse contabilizado los nuevos negocios, el Ebitda hubiera aumentado un 4%, explican desde la empresa.
En 2004, antes del cambio de propiedad y la exclusión de Bolsa, Recoletos registró un beneficio de 16 millones.
El auditor cree que suben los números rojos
El auditor de Recoletos pone dos pegas a las cuentas. En primer lugar, KPMG considera que existe un crédito fiscal por 10,39 millones que 'debiera cancelarse' ya que se refiere a contingencias fiscales que 'podrían resultar en reclamaciones de las autoridades en futuras inspecciones'. Por tanto, según el auditor, el epígrafe de deudores debería disminuir en esa cantidad y el de pérdidas debería aumentar en esa misma cifra.Además KPMG señala que la fusión de Recoletos y Pedifri (dueña del 7%) se hizo efectiva el 17 de febrero de 2005, con efecto contable desde el 1 de enero de 2005. Así el fondo de comercio y el resultado están 'infravalorados' en 3,7 millones y las ventas están 'sobrevaloradas' en 36 millones.