Tele2 y Euskaltel desbancan a Jazztel de la lista de operadores principales de la CMT
La última vez que la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) realizó el análisis de las operadoras de telefonía fija con más peso en el mercado Jazztel se incluyó en la lista. Era la última, pero ahí estaba, como una de las cinco telefónicas con mayor cuota y presencia en ese segmento.
El organismo regulador ha revisado el análisis realizado en 2004 y ayer hizo público el nuevo listado con la situación a cierre del ejercicio pasado. Jazztel ha desaparecido y eso que las fusiones entre operadoras han abierto más hueco para el resto de los rivales.
No ha sido suficiente. La pujanza de Tele2 y Euskaltel ha hecho que sean estas compañías las que acompañen a Telefónica, Ono -la segunda de la clasificación- y France Télécom entre las cinco más significativas. Y no es una elección arbitraria, ya que la CMT utiliza como medida 'la cifra anual de facturación total por prestación de servicios comerciales'. Lo considera 'el parámetro que más fielmente refleja la participación real de un operador en el mercado nacional de telefonía fija'.
La competitividad que hay en este segmento para entrar en la lista no se da en el otro mercado analizado, la telefonía móvil. El hecho de que Xfera, cuya cuota es del 0% y que no dispone de un solo cliente, sea uno de los operadores principales celulares es el mejor ejemplo de ello. Xfera está acompañada de Telefónica Móviles, Vodafone y Amena. A la espera del nacimiento de los operadores móviles virtuales, la quinta plaza está vacante.
La CMT lleva varios años realizando esta clasificación, impuesta en 2000 por un real decreto-ley que pretendía intensificar la competencia en determinados mercados. Los de telefonía fija y móvil estaban entre los escogidos y en ellos había que determinar los cinco operadores con más peso.
Sin embargo, las obligaciones que se derivan de la consideración de 'operador principal' no son demasiado gravosas. En el fondo, se trata sólo de impedir que un mismo accionista tenga poder en varias de las compañías designadas con ese nombre. En caso de que haya cruce de participaciones en una proporción superior al 3%, la empresa implicada tendrá que elegir en qué operadora quedarse y reducir sus derechos políticos en el resto.