Celler Batlle Brut, un cava de larga crianza
Gramona es una de las casas del cava más reconocidas que ha sabido guardar y mantener las esencias de los clásicos espumosos catalanes. Una cuidada selección de la uva y de los vinos base utilizados para elaborar los cavas, y una apuesta por las largas crianzas, son dos los aspectos que la diferencian de otros cavistas del Penedés.
Este año, Gramona celebra su 125 aniversario. Pero sigue manteniendo su espíritu familiar y artesanal en la elaboración de cavas. Ha inaugurado una nueva bodega en Sant Sadurní de Noia, Celler Batlle, y en la nueva andadura impuesta por su enólogo, Jaume Gramona, amplía sus miras hacia los vinos tranquilos. De entre éstos, uno de los más logrados es el Sauvignon Blanc, fermentado en barrica, que se une al Mas Escorpí (un chardonnay), al Gessamí (coupage de sauvingnon blanc y muscat) y al Brut de Gramona, un tinto de pinot noir. De la bodega salen también dos excelentes dulces, Gra a gra y Vil de Gel.
Pero su punto fuerte siguen siendo los cavas. Todo responde a la idea de diversificar y producir cavas de estilos diferenciados, de largas crianzas en rima, con lo que ganan en finura y complejidad. La gama alta de las elaboraciones está representada por el III Lustros, el Imperial, el Argent y el Celler Batlle. Este último es un gran reserva con siete largos años de crianza que sólo se elabora en años de cosechas excelentes, y para el que se emplea un 70% de uva xarel.lo y un 30% de macabeo. En boca es fresco, elegante, sutilmente cremoso, equilibrado y con buena estructura. Su precio: 35 euros.