Los ingresos por el impuesto de sociedades se disparan un 21% en el primer semestre
El vicepresidente económico, Pedro Solbes, presentó ayer por separado a la patronal CEOE y a los sindicatos Comisiones Obreras y UGT las líneas generales de los Presupuestos del Estado para 2007, en los que el Gobierno respetará todos los compromisos sociales contraídos en los últimos meses. Las centrales demandaron liderazgo político a Solbes para frenar la escalada de gasto de comunidades y ayuntamientos.
La reunión matinal con CEOE no deparó sorpresas porque concluyó con las críticas que la patronal acostumbra a hacer a la política económica del Gobierno. José María Cuevas, que no compareció ante los medios de comunicación, trasladó su opinión sobre los Presupuestos a través de un comunicado en el que expresa la preocupación de los empresarios por la evolución de la inflación, los elevados costes laborales, la pobre inversión de investigación y desarrollo y un crecimiento del gasto público que considera expansivo. A juicio de los dirigentes de la patronal, el Gobierno ha afrontado de forma tímida la reforma fiscal puesto que la rebaja del impuesto de sociedades se queda corta, en todo caso alejada de los tipos actuales en la Unión Europea.
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, y el responsable de política institucional de Comisiones Obreras, Salvador Bangueses, se reunieron por la tarde con Solbes y coincidieron con la patronal en la señalización de los puntos débiles de la economía española. Sin embargo, ampliaron algo más su abanico de preocupaciones. De esta forma, trasladaron al vicepresidente económico su inquietud por la indisciplina de comunidades autónomas y ayuntamientos en el control del gasto y le demandaron liderazgo político para ponerle coto, un paso que, en opinión de Comisiones, requeriría un gran acuerdo entre los dos grandes partidos nacionales.
El representante de Comisiones consideró que 'la coordinación entre administraciones para fomentar un mismo modelo económico' basado en la productividad es imprescindible. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, enfatizó que el superávit previsto por el Gobierno para el año que viene 'dependerá exclusivamente de la Seguridad Social' y, por tanto, estará ligado a la evolución del empleo y del crecimiento económico.
Si bien Solbes se comprometió con la patronal y los sindicatos a presentarles en septiembre las partidas concretas de gasto, les avanzó que la inversión en I+D+i crecerá el año que viene un 31% y en vivienda un 15%. La ley de Dependencia estará dotada en 2007 con 400 millones de euros, 200 más que en este ejercicio, presupuesto que Economía considera suficiente para su encauzamiento inicial. No obstante, su financiación preocupa al Gobierno por la tendencia que pueden tener algunas comunidades autónomas a adelantar sus plazos de aplicación por motivos electorales, teniendo en cuenta que en mayo se celebrarán comicios locales y autonómicos. La ley de Igualdad, otro proyecto estrella del Ejecutivo, estará dotada con otros 400 millones de euros.
Presupuestos neutrales
Méndez le trasladó a Solbes la necesidad de mejorar las partidas destinadas a fomentar las políticas activas de empleo y dotar de mayores medios a la inspección de trabajo.
El secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, negó que los Presupuestos del año que viene vayan a ser expansivos, entre otras razones porque el gasto crecerá lo mismo que la economía. 'Se mantendrá el peso del sector público y por tanto van a ser unos Presupuestos neutrales', señaló.
Aparte del aval de los sindicatos, el Gobierno ya ha recibido el respaldo anticipado de CiU, PNV y CC, formaciones que le garantizan una cómoda mayoría parlamentaria.
Hacienda ingresa un 21% más por sociedades
Mientras Solbes y los agentes sociales discutían ayer sobre las cuentas públicas de 2007, el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, ofreció datos sobre la marcha de la ejecución presupuestaria de este año. Las cuentas del Estado central marchan bien, 'incluso por encima de lo previsto', ayudados por los beneficios empresariales, indicó Ocaña. Los ingresos no financieros crecieron a un ritmo del 9,4% hasta junio en relación al primer semestre del año anterior, impulsados por la recaudación por impuestos, que subió un 11,9%.Ello ha permitido que el Estado central registre hasta junio un superávit del 2.558 millones de euros, equivalente al 0,27% del PIB en términos de contabilidad nacional (criterio de homologación en toda la UE utilizado por Bruselas). Este superávit es algo más del doble de los 1.194 millones alcanzados en esta misma fecha, el año pasado.Es de destacar tanto la evolución de los ingresos indirectos (ligados al consumo), que crecieron un 9,9% como la de los directos, que lo hicieron al 14,3%. En este último grupo sobresale la recaudación del impuesto de sociedades, con un espectacular incremento del 21,3% (hasta 7.293 millones de euros), fruto del buen momento que viven los resultados empresariales. Como datos negativos se encuentran el escaso avance de la recaudación por hidrocarburos (lo hace al 2,4%) influida por el encarecimiento del petróleo; y la caída en los ingresos por tabaco, afectada por los cambios de tributación de meses anteriores.