Las viviendas protegidas podrán venderse como libres a los diez años en Andalucía
La parálisis del mercado de compraventa de viviendas de VPO y la movilización de los afectados ha obligado a la Junta de Andalucía a rebajar el blindaje que aplicó a este tipo de inmuebles con el ánimo de atajar la especulación. En el reglamento aprobado ayer, que desarrolla la Ley de Vivienda Protegida de Andalucía, se abre la posibilidad de descalificar estas viviendas para poder venderla en el mercado libre sin restricciones de precios a partir de los diez años, siempre que se cumplan determinadas condiciones como la devolución de los préstamos o ayudas estatales. En la orden anterior, la pérdida de la condición de VPO se extendía hasta los 15 años, aunque se mantiene en cualquier caso la obligación de los notarios de comunicar a la Junta las operaciones de compraventa de VPO que se realicen. En el caso de que no se ajusten a los límites, la Administración podrá recuperar la vivienda a precio tasado.
La consejera de Obras Públicas y Transportes, Concepción Gutiérrez, manifestó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que esta medida, que se lleva a cabo de acuerdo con las consideraciones que hizo el Consejo Consultivo, es 'mucho menos rígida que la normativa estatal'. Una vez solicitada la descalificación, la Junta responderá en el plazo de tres meses y el interesado deberá devolver las subvenciones recibidas.
El límite de diez años podrá ser menor si se dan circunstancias como cambio de trabajo o familia numerosa. Si se mantiene la condición de VPO en la transmisión también se deberá esperar diez años y vender a un precio tasado.