Los recargos al calzado chino dividen a la UE
La imposición de recargos definitivos a las importaciones de calzado de cuero procedentes de China y Vietnam dividió ayer a los países de la UE y reprodujo el enfrentamiento registrado hace un año con la crisis del textil. Reino Unido y los países nórdicos se opusieron a las tarifas antidumping, mientras que los países productores, como España, Italia o Francia, consideran que la propuesta de la Comisión no es un freno suficiente a la avalancha de zapatos chinos.
Expertos de los Veinticinco discutieron en Bruselas los planes del comisario de Comercio, Peter Mandelson, que consistirán, según diferentes fuentes, en establecer un contingente de 140 millones de pares de zapatos chinos que entrarían con la tarifa normal del 7,5%. Una vez superado este límite, se impondría una tasa del 23%. Para el caso de Vietnam la cuota libre de tasas es de 95 millones, y el recargo del 29,5%. Este régimen sustituiría al sistema de aranceles progresivos que se aplica desde abril. Ningún Estado miembro apoyó los planes de Mandelson, y la mayoría de las delegaciones, entre ellas Alemania, destacaron las dificultades técnicas para aplicarlas, especialmente a la hora de hacer el reparto de licencias entre los importadores, según fuentes conocedoras del encuentro. Tras haber escuchado a los 25, la Comisión adoptará una propuesta definitiva en los próximos días. Los expertos celebrarán una nueva reunión el 27 de julio.
Los recargos definitivos deben ser respaldados por los Estados antes del 6 de octubre, fecha en la que vence el régimen transitorio, y tendrían una vigencia de 5 años con revisiones anuales.
Si no hay ningún acuerdo, no se aplicarían tasas, informa Europa Press.