'Los países pobres necesitan crear demanda interna'
El líder de la conferencia de la ONU para el comercio y el desarrollo sostiene que la ayuda internacional no debe limitarse a la reducción de la deuda externa
Acaba de participar en Madrid en el Encuentro Iberoamericano sobre Migración y Desarrollo, y hoy presenta el informe anual de la UNCTAD sobre el progreso de los países menos avanzados (PMA). Cincuenta Estados que suman más del 10% de la población mundial y menos del 1% de su PIB.
¿Ha mejorado la situación económica de los países más pobres en los últimos diez años?
En términos globales, sí. El encarecimiento de las materias primas supone más recursos derivados de las exportaciones, lo que, unido a las remesas de los emigrantes y a la ayuda externa, dibuja un panorama algo mejor. Pero algo parecido pasaba hace 30 años y el abaratamiento de las exportaciones llevó al traste todos los avances. De resultas, el PIB per cápita de los 50 países sólo ha crecido un 0,72% anual.
¿Cómo se evita esa vulnerabilidad?
Sentando las bases para que se cree demanda interna y se reduzca la dependencia exportadora. Eso se logra desarrollando capacidades productivas que creen empleo y posibiliten un consumo suficiente para tirar de la economía. Hay que movilizar los recursos internos existentes, e invertir en capital físico y humano. El momento es crítico, porque por primera vez la población activa crece más en el resto de los sectores que en el agrícola.
¿Es suficiente la ayuda internacional al desarrollo?
En nuestro informe constatamos un mayor compromiso de los países ricos, en línea con lo acordado por el G-8. Lo que ocurre es que buena parte de la ayuda se destina a aliviar la deuda externa. Ese alivio es necesario, pero no suficiente para crear las bases de desarrollo autónomo. Hay que conseguir fondos que financien la inversión y desarrollen capacidades productivas.
¿Cómo se desarrollan esas capacidades?
Básicamente, mediante la acumulación de capital físico (infraestructuras) y humano (educación), el progreso tecnológico y el cambio estructural. En el ámbito educativo, el papel de Banco Mundial está siendo muy positivo. La UNCTAD también apoya la inversión en conocimiento, de forma que la educación se adecúe a las oportunidades de empleo. Las políticas locales e internacionales deben buscar el inicio del círculo virtuoso en el que el desarrollo de las capacidades productivas y la demanda interna se refuercen mutuamente.
¿Qué papel juegan las remesas que envían los inmigrantes?
Fundamental. El importe de las remesas multiplica por tres o por cuatro la ayuda oficial al desarrollo, y la tendencia es creciente. Ahora bien, hay que buscar la optimización de su uso: queremos fomentar que contribuyan al desarrollo de los países. Hay que buscar los medios para que parte de ese dinero se destine a financiación de proyectos, a creación de microempresas... En definitiva, a lograr que, con el tiempo, los habitantes del país no tengan que emigrar.
¿Cómo está afectando la globalización a los PMA?
La apertura de los mercados mundiales representa una gran oportunidad para los países que están en disposición de competir. Lo que ocurre es que la mayoría de los PMA no pueden hacerlo, porque no tienen una base productiva consolidada.
Adecuar el marco institucional
Una de las grandes trabas para que la ayuda oficial al desarrollo tenga éxito es la corrupción de muchos gobiernos de países pobres. Panitchpakdi destaca que la creación de las 'capacidades productivas' de las que habla requiere la existencia de un marco institucional adecuado: 'Los casos de corrupción son graves y desalientan a los países que ayudan, pero no son el único problema institucional. En general, los países menos avanzados presentan un déficit de gobernanza, de cultura de la transparencia. En la ONU trabajamos en varios programas para construir instituciones fiables y enlazarlas mediante un sistema de redes con el sector privado'.Uno de los objetivos de esos programas es generalizar el uso de los presupuestarios: 'La instauración de presupuestos de gasto rigurosos por parte de los gobiernos supondría una gran ayuda', sostiene. 'Es una medida que aumenta la transparencia y contribuye a consolidar un marco institucional predecible, en el que pueda desarrollarse la iniciativa privada desde el nivel de microempresas'.