Un regalo de 35.000 millones
Warren E. Buffet, el presidente de la aseguradora Berkshire Hathaway, es uno de los hombres más ricos del mundo. Su fortuna asciende a unos 44.000 millones de dólares (35.100 millones de euros). A partir de hoy, será conocido como uno de los mayores benefactores de la historia. El magnate estadounidense va a donar el 85% de su fortuna, 37.400 millones de dólares, a diversas fundaciones benéficas, principalmente la de Bill y Melinda Gates.
Las donaciones se harán mediante acciones de la compañía Berkshire Hathaway y la parte del león irá a parar a la Bill y Melinda Gates Foundation, la organización benéfica que el patrón de Microsoft y su esposa dirigen con fines principalmente educativos y sanitarios. En total, la fundación del matrimonio Gates recibirá 31.000 millones, lo que contribuirá a reafirmarla como la mayor y más influyente organización filantrópica del planeta. Actualmente, la fundación de los Gates tiene un patrimonio de 30.000 millones de dólares, que se doblará con la aportación de Buffet, el cual pasará a ser socio junto a Bill y Melinda.
Los activos en poder de la fundación Gates destacan cuando se los compara con el presupuesto de la Organización de la ONU para la Ecuación, la Ciencia y la Cultura, la UNESCO, que ascendió a 610 millones de dólares en 2004-2005. La Bill and Melinda Gates Foundation gastó en 2005 1.360 millones de dólares, gasto que podrán doblar cuando se haga efectiva la donación de Buffet. Esta no se hará de una sola vez, sino que se irá haciendo en aportaciones anuales que irán aumentando su cuantía. La forma de pago cambiará, de forma no especificada, en caso de que Buffet, de 75 años, muera antes de completarse la donación, condicionada a que al menos uno de los Gates siga trabajando en la fundación.
Buffet y Gates se conocieron en 1991 y desde entonces entablaron una estrecha amistad que se ido solidificando con los años hasta hoy. Juegan partidas de bridge on line a menudo y buscan el consejo del otro en sus respectivos negocios. Hoy mismo, harán el anuncio de la donación con una entrevista conjunta en un programa de la PBS (Public Broadcasting System, la televisión pública). Será el punto final a ua campaña de promoción que incluye también anuncios en la prensa, una charla entre ambos en la Biblioteca Pública de Nueva York y una conferencia de prensa en un hotel de Manhattan.
Con este dispendio, Buffet entra en la historia, junto a otros magnates como Andrew Carnegie, John D. Rockefeller, Henry Ford, J. Paul Getty, W. K. Kellogg y el propio Gates, que donaron sus fortunas para fines benéficos. Buffet siempre ha sostenido que no haría una donación de este tipo hasta su muerte, pero el fallecimiento de su esposa Susan en 2004 y su confianza en los Gates y su organización le han decidido a adelantar su acción benéfica.
Las otras organizaciones a las que Buffet deja su fortuna son: la Susan Thompson Buffett Foundation, que lleva el nombre de su esposa y que se dedica a la planificación familiar, el derecho al aborto y la no proliferación nuclear; la Howard G. Buffett Foundation, con el nombre de uno de sus hijos y dedicada a asuntos medioambientales; la Susan A. Buffett Foundation, con el nombre de su hija y dedicada a promover la educación de niños pobres; y la NoVo Foundation, dirigida por su otro hijo y que se centra en la educación y los derechos humanos.