La ruta de la plata
Las provincias de Salta y Jujuy, en el norte argentino, son la joya central, apenas conocida, de una cadena paisajista y cultural de alcance histórico y gran potencial turístico
La plata americana tenía dos caminos primerizos para salir hacia la Metrópoli desde las minas de Potosí y Alto Perú: la ruta occidental iba por el Pacífico hasta Panamá; la ruta oriental cruzaba el altiplano y puna andinos, descendía a los valles del norte argentino y continuaba por los senderos marcados por los ríos hasta el Virreinato del Río de la Plata. Las provincias de Jujuy y Salta son el 'eslabón perdido' en ese corredor natural que ya antes habían utilizado los incas, como después lo utilizarían los ejércitos enfrentados -rebeldes contra realistas- en la lucha por la Independencia.
La Quebrada de Humahuaca, en Jujuy, es un ejemplo excepcional. Hace tres años fue declarada por la Unesco patrimonio de la humanidad, precisamente por su calidad de Paisaje Cultural. Es un pasillo gigantesco de 155 kilómetros de largo, que arropa a la cuenca del Río Grande, y enlaza la puna y tierras altas andinas con los valles templados surandinos. Un pasillo por el que han transitado aborígenes de distintas etnias desde hace 10.000 años, dejando siempre alguna huella. Dicho así, no suena muy llamativo, pero es lo cierto que la Quebrada de Humahuaca es uno de los paisajes más deslumbrantes de toda América.
La Paleta del Pintor
El cromatismo de las cárcavas y cerros pelados es lujuriante: vetas de esmeralda, cadmio, cobalto, ceniza o granate se entreveran y escalonan en el breve espacio que abarca un golpe de vista. Ni el más desaforado de los fauvistas se habría atrevido a tamañas combinaciones. Los cerros de Maimará conocidos como Paleta del Pintor o el Cerro de los Siete Colores de Pumamarca son sólo dos de los puntos más accesibles.
Con todo, es la humanización del paisaje lo que sella finalmente su grandeza. Pueblitos de adobe inmemorial, con iglesucas coloniales, resplandecientes, calles de tierra bermellón, inundadas de tendajos con vasijas de arcilla y telas multicolores, rostros esculpidos por la mano del sol, del viento o del tiempo, rostros indígenas herméticos, como un mineral desprendido de los cantiles.
El pueblo de Humahuaca, aun siendo el más animado, por los mercados callejeros, parece suspenso en el tiempo; sólo el colosal Monumento a la Independencia (se libraron por aquí once batallas) rompe esa ucronía. Cerca de Ticara, retirada en una montaña, se puede ver una pucará o aldea fortificada de los incas. Más abajo, la Posta de Hornillos, convertida en museo de los caminos, es un ejemplo excepcional de las ventas o paradas que jalonaban la ruta de la plata. San Salvador de Jujuy, la capital, fue fundada en 1593 entre dos ríos, Grande y Xibi Xibi (chico), y está más cerca de cinco países vecinos que de Buenos Aires. Es decir, transpira un cierto aire fronterizo, subrayado por la Casa de Gobierno y su Salón de la Bandera, con reliquias del General Belgrano y el æpermil;xodo de 1812, cuando la población huyó dejando a los realistas tierra quemada. La catedral barroca y el teatro Mitre (1901) son de lo poco antiguo que sigue en pie.
También la ciudad de Salta, muy cercana a Jujuy, es una ciudad de perfiles bastante modernos, eso sí, encastrados en una cuadrícula colonial intacta desde 1582. La catedral, la barroca y polícroma iglesia de San Francisco, el convento de San Bernardo y alguna que otra casona hispánica le dan a esta ciudad un aire reposado y provinciano.
Algo que se quiebra, como por ensalmo, cuando llega la noche: entonces en la calle Balcarce y cercanías de la Estación de Trenes se forma una de las movidas más increíbles, con docenas de restaurantes, terrazas, locales y peñas donde se hace música en vivo y adonde acuden espontáneos de todo el país (incluso de México o Perú) para darse a conocer; de ahí salieron artistas como los Chalchaleros, Dino Saluzzi y otros. Solo por esto, Salta merece un puesto de honor en la agenda del viajero.
Guía para el viajero
cómo ir Air Madrid (902 515251, www.airmadrid.com) tiene vuelos directos entre Madrid y Buenos Aires todos los días, excepto viernes; ese día el vuelo es vía Tenerife; desde Barcelona tiene vuelo directo los lunes, y vía Tenerife, los viernes. Tarifas a partir de 490 euros. Desde Buenos Aires a San Salvador de Jujuy, Aerolíneas Argentinas tiene dos vuelos directos de lunes a viernes, y un vuelo sábados y domingos, y otros dos vuelos diarios con escala; informes y reservas: 0 810 222 VOLAR (86527).alojamientoEn Jujuy: Hotel Ohasis (calle Ramírez de Velasco, 244, teléfono 54 388 4241017, www.ohasishoteljujuy.com), funcional, a un paso de la plaza central. En Salta: Hotel Presidente (Avda. Belgrano 353, teléfono 54 387 4312022/23, www.granhotelpresidente.com); también Sheraton Salta (Avda. Ejército del Norte 330, 54 387 4323000); la misma compañía tiene al sur de la provincia un hotel que es por si solo un destino viajero: Patios de Cafayate Wine Spa (Ruta Nacional 68, 54 3868 421201, www.starwoodhotels.com), una amplia finca vinícola con producción propia, hacienda tradicional de gran lujo, cocina y cuidados corporales basados en el vino.