'No hemos recibido cartas de extorsión desde el alto el fuego'
Los empresarios de Euskadi han encontrado un nuevo clima, más amable y tranquilo, desde el anuncio de ETA, hace ahora dos meses, de un alto el fuego permanente. Miguel Lazpiur (Bergara, Guipúzcoa, 1942), presidente de la patronal vasca Confebask, estima que el proceso de paz abierto será 'muy largo', que los pálpitos son buenos y que el optimismo es mayor que en la tregua de 1998, pero más contenido.
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Blindar el Concierto para evitar los constantes recursos
José Zubia, secretario general de Confebask, el cerebro gris de la organización empresarial vasca, tiene claro que el Concierto Económico, el régimen que regula las relaciones tributarias entre la Hacienda del Estado y las tres haciendas forales vascas (Álava, Guipúzcoa y Vizcaya), es uno de los puntos de unión para la gran mayoría de los habitantes de Euskadi.Posiblemente, lo conocen más por ser cuestionado reiteradamente en los juzgados, tanto en España como en la Unión Europea, un capítulo que Zubia considera que se debería desterrar blindando las normas forales en materia tributaria, de tal manera que solo puedan ser recurridas por el Gobierno central al igual que ocurre con el Convenio de Navarra, un sistema similar.El secretario general de Confebask propone para ello una modificación de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional con el objetivo de que los impuestos a aplicar en el País Vasco tengan rango de ley. Considera que se han producido arbitrariedades por parte de los tribunales en España y en Luxemburgo a la hora de sentenciar sobre determinadas normas vascas porque han utilizado el arma de la competencia para entrar a dictaminar en materia fiscal. Apoya este argumento en que, por ejemplo, Irlanda aplica un impuesto de sociedades del 12,5% frente al 35% de territorio común y el, hasta hace poco, 32,6% de los territorios forales. Abunda en el tema para afirmar que en el País Vasco el tipo máximo en el IRPF es del 48% frente al 45% del resto de España.Zubia señala que en la prevista reforma del impuesto de sociedades influirán varios factores: la competencia interna en materia fiscal, la entrada en vigor de las normas internacionales de contabilidad y la jurisprudencia emanada del Tribunal de Luxemburgo.