Los toros de Fuente Ymbro decepcionan en Madrid
Como tantas veces suele ocurrir, una de las corridas de mayor expectación de la feria finalizó siendo una de las que más decepcionantes. Se esperaba mucho de los toros de Fuente Ymbro, una vacada muy encastada y que suele cosechar grandes triunfos en otras plazas. Sin embargo, en su presentación en Madrid, en corrida de toros, los seis ejemplares fueron un pálido reflejo del comportamiento que esta ganadería ha tenido en Madrid otros años en novillada. Muy bien presentados, astifinos y con gran cuajo, sin embargo ninguno embistió por derecho. Algunos, incluso, tuvieron verdaderas dificultades.
No hubo por tanto, ninguna faena redonda. Y solamente es posible destacar algunos momentos aislados de cierta intensidad. Por ejemplo, como toreó El Juli al primero con el capote, y el buen quite por chicuelinas que éste torero hizo al segundo de su lote. También es remarcable la actitud con que Miguel Ángel Perera hizo frente al sexto, tras salir de la enfermería donde fue atendido de un fuerte hematoma en el muslo derecho que le había provocado su primer toro tras una voltereta escalofriante. Perera lo buscó en ambos con decisión y valor, los mismos que también había tenido El Juli con sus dos toros, pero ninguna de las cuatro faenas fueron más allá de vanos intentos.
Tampoco fueron buenos los ejemplares que correspondieron a Finito de Córdoba; la única diferencia fue que el torero estuvo mucho más inhibido que sus compañeros, y así se lo hizo notar el público en sendas pitadas.
Con esta corrida se rompió la racha de éxitos que había encadenado la feria de San Isidro en las cuatro corridas anteriores. En esos festejos se cortaron un total de 7 orejas, sorprendente para la plaza de Madrid. Entre todos los toreros triunfadores de la primera semana, sobresalió César Jiménez que abrió la puerta grande en la segunda de abono, el jueves 11. Ese mismo día, obtuvieron también un trofeo Luis Miguel Encabo y Eduardo Gallo. En los días siguientes cortaron un apéndice tres toreros que estuvieron muy valientes: Sebastián Castella, Fernando Cruz y Antonio Ferrera.