Coca-Cola, el jarabe que curaba la jaqueca, cumple hoy 120 años
A base de hoja de coca y nuez de cola, salió a la venta el 8 de mayo de 1886 en una farmacia de Atlanta
Un sirope que alivia las jaquecas, cura las afecciones nerviosas y facilita la digestión. Esos eran los beneficios que prometía Coca-Cola cuando salió a la venta el 8 de mayo de 1886. Su creador, el farmacéutico John S. Pemberton, no podía imaginar que su jarabe a base de extracto de hoja de coca y nuez de cola iba a convertirse en un icono mundial, hasta el punto de ser la segunda expresión más pronunciada en el mundo, por detrás de las siglas OK. Según la empresa, el 94% de la población mundial conoce la marca.
La fórmula del éxito sigue siendo un misterio. La compañía alimenta la leyenda y asegura que sólo dos personas conocen la manera correcta de mezclar todos los ingredientes, pero nunca viajan juntos, ni comen en los mismos lugares. La receta, denominada Merchandise 7X, permanece a buen recaudo en el SunTrust Bank Building de Atlanta.
La expresión Coca-Cola se debe al contable de Pemberton, Frank Robinson, que pensó que las dos 'C' se verían bien en la publicidad. Sólo tres semanas después de salir a la venta, aparecieron en la sección de anuncios por palabras del Atlanta Journal Constitution los primeros reclamos de Coca-Cola que pretendían atraer a los consumidores con eslóganes como ¡Deliciosa! o ¡Vigorizante! Pero la base de la expansión del refresco, que se comercializaba en sifones de soda, fue tratar de posicionar el producto en todos los lugares donde pudiese haber consumidores interesados. En cuatro años, Coca-Cola consiguió estar presente en todos los Estados del país.
En 1889 se llegó a un acuerdo para embotellar la bebida en EE UU, pero hubo que esperar hasta 1915 para que saliese al mercado la popular botella contour, diseñada por Alexander Samuelson. Ese año, la compañía convocó un concurso para unificar los envases y evitar imitaciones. La única directriz, que la botella pudiese ser reconocida inmediatamente, incluso a oscuras. Lejos de los rumores que ligan la sinuosidad del envase a la contorneada silueta de la actriz Mae West, el diseño del vidrio se basó en la aflautada forma de la nuez de cola.
Las primeras embotelladoras fuera de EE UU se instalaron en 1906 en Panamá y Cuba. El refresco llegó a España en los años veinte, aunque su difusión masiva se produjo en la década de los cincuenta. Sin embargo, el acontecimiento que marcó el despegue internacional de Coca-Cola fue la Segunda Guerra Mundial. Ya estaba presente en 44 países, pero con la entrada de EE UU en el conflicto la compañía se propuso que todos los soldados estadounidenses pudiesen acceder a una botella, dondequiera estuviesen y sin importar el coste que pudiera tener para la empresa. El conflicto provocó que se interrumpiese el suministro de concentrado de Coca-Cola a Alemania y el embotellador germano tuvo que ingeniar un nuevo producto que le permitiese seguir utilizando los equipos de producción. Nacía Fanta.
En estos 120 años, la compañía ha pasado de vender nueve coca-colas diarias a más de 1.300 millones en más de 200 países. De hecho, asegura que si se colocasen a lo ancho de una autopista de cuatro carriles botellas contour con toda la Coca-Cola producida hasta la fecha, esta carretera daría 81 vueltas alrededor de la Tierra.