Un pulso sindical acaba con una oportunidad para VW Navarra
La planta de Volkswagen en Landaben y la propia economía de Navarra se enfrentan a una situación crucial de su historia. La dirección de Volkswagen en Wolfsburgo confirmó el martes que ha iniciado las medidas necesarias para incrementar la fabricación del modelo Polo en otras plantas del grupo, probablemente Bratislava o Bruselas. Esta noticia, en la práctica, viene a suponer que la factoría navarra producirá en breve menos unidades del Polo, el único modelo que tenía adjudicado. Y, justo en uno de los peores momentos, cuando las ventas de la marca vuelven a liderar el recuperado mercado europeo, y cuando VW se planteaba otorgar en exclusiva el Polo a Landaben.
Un desencuentro aún más grave si se tiene en cuenta que la industria de la automoción española vive con el fantasma de la deslocalización rondando por las plantas españolas; y el duro programa de recorte de costes aplicado desde hace dos años por Volkswagen, que ha eliminado 31.000 empleos desde 2004.
El motivo aparente que ha causado este 'grave' desenlace, citando fuentes de la industria, ha sido el desencuentro entre la dirección y los sindicatos acerca del nuevo convenio colectivo, el cual no ha podido ser aprobado tras 16 meses.
La situación ha desembocado en un 'callejón sin salida', según el sector, y ha acabado con la paz social en Landaben
Este desacuerdo, sin embargo, no ha sido motivado tanto por las diferencias con la empresa, sino que en realidad responde a motivos políticos, según aseguran diversas fuentes del mercado: el enfrentamiento entre los dos sindicatos mayoritarios, CC OO y UGT, que se reproduce en casi todas las plantas de ensamblaje en España; el enfrentamiento con el Gobierno autonómico de UPN, cercano al PP; y, sobre todo, la celebración de elecciones sindicales en la planta el próximo año.
Este enfrentamiento ha dejado en un segundo plano la discusión sobre los términos del convenio, toda vez que las diferencias entre lo propuesto por la empresa y lo exigido por el comité son mínimas. VW pedía 11 días de flexibilidad ampliables a 15, además de una subida salarial del IPC más el 0,5%, y un calendario de 209 días. UGT aceptó esta propuesta y, como medida de desbloqueo, propuso que la plantilla la votase en referéndum, acuerdo que sirvió para desbloquear una situación similar en la planta vitoriana de Mercedes Benz.
En Landaben, en cambio, CC OO y LAB decidieron marcar diferencias de cara a las urnas, radicalizar su postura con la convocatoria de paros que se llevaron por delante la fabricación de 1.159 coches al día y rechazar el referéndum, pese a que su propuesta no era tan diferente: calendario de 209 días, bolsa de flexibilidad de nueve, subida del IPC más 0,5 puntos entre 2006 y 2008 y el 100% de las tablas para 2005, y dos pagas de 250 euros. Esta lucha entre CC OO y UGT ya se vivió en Figueruelas. UGT era partidaria de aceptar medidas de flexibilización para retener el Meriva; CC OO tensó la cuerda, si bien al final relajó su postura, lo que posibilitó un acuerdo.
Lo cierto es que la negociación ha desembocado en un 'callejón sin salida', según aseguraron ayer fuentes del sector. En primer lugar, porque difícilmente podrá la empresa sentarse ahora a negociar con CC OO y dejar así sin legitimidad a UGT. En segundo lugar, porque VW ya ha dicho que su oferta es la 'última' e 'inamovible'. Y, en tercer lugar, porque fuentes cercanas aseguran que con la pérdida de la paz social y con las movilizaciones, la matriz ha perdido la confianza, algo difícil de restaurar.
Los sueldos, en el podio
Volkswagen presenta considerables diferencias salariales entre sus distintas plantas europeas. El salario medio mensual en las factorías alemanas hace tres años era de 2.404 euros (en la fábrica central de Wolfsburgo ronda los 3.000). En ese ejercicio, en Landaben oscilaba entre 1.503 y 1.803 euros al mes, y en Bratislava era de 391. Para contrarrestar los altos sueldos que cobran los trabajadores en Wolfsburgo, la compañía creó hace varios años Auto 5000, que emplea a trabajadores que cobran entre un 20% y un 40% menos que lo que contempla el convenio de VW.Los empleados de Landaben se encuentran entre los mejor pagados en España, según CC OO. El salario medio de una categoría de nivel medio en la planta navarra está en 22.321 euros anuales, un sueldo que sólo se supera en Nissan Motor Ibérica (25.805 euros) y Seat (22.856). En la parte baja de la tabla están las fábricas de PSA en Madrid (17.967 euros) y Vigo (17.886).