Cinco entidades entran en la puja final por el Banco Urquijo
La venta del Banco Urquijo entra en su fase final. Banco Sabadell, Banif, Espírito Santo, Barclays y Crédit Agricole han sido seleccionadas entre una decena de entidades interesadas y presentarán en los próximos días las ofertas vinculantes. El precio ofrecido podría rondar los 700 millones, según diversas fuentes.
El dueño del Banco Urquijo, el grupo belga KBC, ya tiene seleccionadas a las cinco entidades que pasarán a la subasta definitiva para hacerse con el histórico banco español. El francés Crédit Agricole ha sido el último en confirmar que se encuentra entre las entidades que pasan a la segunda fase del proceso. Las otras cuatro, según ha podido confirmar Cinco Días, son Banco Sabadell, la filial de banca privada del Santander, Banif, el británico Barclays y el portugués Espírito Santo. El mercado lleva días barajando la posibilidad de que Deutsche Bank, que habría pujado activamente por el banco, también se encontrase entre las seleccionadas.
La pugna por una de las marcas con mayor solera del sector financiero español ha subido considerablemente de tono en las últimas semanas. Las ofertas han superado con creces los 500 millones de euros en los que se estimaba que el grupo belga había valorado inicialmente el banco, cuyo principal atractivo, además de su marca, es la cartera de grandes patrimonios y sus 60 sucursales. Tal y como se especulaba en el mercado, algunos candidatos podrían haber presentado ofertas superiores a los 700 millones, casi el doble del precio que KBC pagó por la entidad hace tres años. Ayer el diario económico francés Les Echos elevaba hasta esta cifra el precio ofrecido por el banco cuyo máximo responsable es Alfonso Álvarez Tolcheff.
Fuentes involucradas en la operación, han señalado, sin embargo, que dicha cuantía es 'excesiva'. Estas mismas fuentes señalaron que 'una vez que hemos tenido acceso a todas las cifras del banco, nos hemos encontrado con aspectos que no se esperaban'. De hecho, el Urquijo cuenta con una 'estructura de costes compleja' y 'una excesiva concentración de clientes' por lo que muchos de ellos tendrían que ser ubicados en segmentos más cercanos a la banca personal o banca comercial.
La pugna podría haber disparado el precio hasta más de 700 millones de euros
Lo cierto es que la entidad belga parece haber acelerado el proceso de venta y espera tener al candidato definitivo en el mes de mayo. Hace dos semanas tuvo lugar el dataroom, el proceso en el que el banco que asesora en la operación, JP Morgan, hace la primera criba y pone a disposición de las entidades preseleccionadas todas las cuentas del banco. Se espera que la semana que viene los cinco bancos elegidos afinen sus criterios y formulen las ofertas vinculantes. De esta forma a lo largo del mes de mayo, el grupo belga estudiaría las propuestas definitivas y seleccionaría al candidato que mejor se ajusta a sus estimaciones. Inicialmente, además de la venta se barajó la integración de la entidad española en la filial de banca privada del belga, KBL. La opción, según el grupo, dependería de cuál de las dos 'creara más valor' para el accionista.
La confirmación del jueves de Crédit Agricole refuerza la apuesta que la banca extranjeras esta haciendo por España. El banco francés tenía hasta ahora presencia en banca corporativa a través de su filial Calyon pero no en banca minorista.
En el caso del portugués Espírito Santo y Barclays, la adquisición del Urquijo supondría reforzar su presencia, una apuesta confirmada especialmente por el banco luso. Además, la compra encajaría en el plan de crecimiento puesto en marcha por Banif, pero el mercado apunta a que es el Sabadell el que presenta una mayor complementariedad.
El potencial de una marca histórica
El negocio de banca privada es, ante todo, un segmento de mercado en el que la marca, la reputación y la confidencialidad son elementos esenciales. Los grandes patrimonios, que en España han crecido significativamente en los últimos años gracias a la bonanza económica, se llaman unos a otros. Y el Banco Urquijo goza de un reconocido prestigio, forjado en su larga experiencia en el sector. El origen del banco se remonta a 1870 y desde entonces ha velado por el patrimonio de grandes familias españolas. No fue hasta 1988 cuando la familia March se hizo con la mayoría del capital. Diez años después, el grupo belga KBC puso su mirada en el potencial de las grandes fortunas españolas ya que en 1995 abandonó su intento de hacer banca universal.La operación de compra se realizó en diferentes fases. En un primer lugar adquirió el 70% del banco por 252 millones. Y en los años hasta 2004 fue adquiriendo el resto hasta pagar un total cercano a los 390 millones. Desde entonces, y especialmente a partir de 2005, el banco ha estado sometido a un potente proceso de reestructuración, impulsado además, por la creciente competencia en el segmento y la presencia cada vez más activa de entidades nacionales y extranjeras en la banca privada. Precisamente estas últimas han encontrado en las grandes fortunas un nicho de mercado para hacerse hueco en el competitivo sector financiero español. Urquijo reordenó su cúpula para poner el acento en la gestión de activos y la banca de empresas, uno de los segmentos complementarios a la gestión de grandes patrimonios.En la actualidad el Urquijo tiene 60 oficinas y 815 empleados. En el ranking de patrimonios gestionados se sitúa en el quinto puesto con unos 7.770 millones de euros gestionados, según las últimas cifras disponibles. La reorganización de la entidad ha supuesto que el segmento de banca privada aporte cerca del 40% de sus ingresos, mientras que las actividades de asesoramiento a empresas supongan otro 40%. El resto correspondería a negocios de banca minorista.Según los datos provisionales difundidos por la propia entidad, el pasado año obtuvo un beneficio de 10,5 millones, lo que supone un descenso del 25% respecto a las cifras un año antes.