Chirac retira el polémico contrato para jóvenes
Los jóvenes franceses han ganado la batalla por sus derechos laborales. El presidente francés, Jaques Chirac, ha decidido retirar el contrato de primer empleo (CPE) para jóvenes menores de 26 años, que permitía el despido automático y sin causa durante los dos primeros años de la relación laboral. El rechazo de los estudiantes franceses a este contrato les había llevado a protagonizar dos meses de huelgas y protestas en las calles de toda Francia, que en varias ocasiones se saldaron con numerosos heridos y detenidos.
El contrato, que se incluía en el capítulo ocho de la ley de igualdad de oportunidades aprobada hace un mes por el Parlamento, será sustituido por un mecanismo a favor de la inserción profesional de los jóvenes con dificultades para entrar en el mercado laboral.
El nuevo mecanismo se compone de cuatro medidas que amplían y refuerzan los mecanismos ya existentes, como el contrato de jóvenes en la empresa, el de profesionalización (formación) o el de inserción en la vida social, y prolongan el seguimiento de la trayectoria profesional de los contratados. La fórmula prevé aumentar las bonificaciones a los empresarios que contraten a jóvenes. Chirac admitió que decidió este cambio 'a propuesta del primer ministro', Dominique de Villepin. De hecho la sustitución del CPE se anunció después de que el presidente recibiera a Villepin a primera hora de la mañana.
Tras dicho encuentro, ambos se reunieron con el número dos del Gobierno y presidente del partido en el poder, Unión por un Movimiento Popular (UMP), Nicolas Sarkozy, que en los últimos días de la crisis se había erigido en negociador con los sindicatos, lo que había fomentado su imagen de principal rival de Villepin para las próximas elecciones. En esta reunión estuvieron también presentes otros responsables gubernamentales.
Tras este anuncio, las reacciones no tardaron en llegar. La presidenta de la Confederación Estudiantil, Julie Coudry, pidió a los estudiantes que levanten el bloqueo en las universidades para que 'los exámenes se puedan realizar en las mejores condiciones', y el presidente de la Federación de Asociaciones Generales Estudiantiles (FAGE), Jean-François Martins, celebró la 'muerte' del CPE.
El cambio costará este año 150 millones
A diferencia de lo que habría supuesto la creación del Contrato de Primer Empleo (CPE), las nuevas medidas de inserción de los jóvenes con dificultades para entrar en el mercado laboral, que adoptará el Gobierno francés supondrán un sobre coste para las arcas públicas de 150 millones de euros este año y el doble en 2007. Con este dinero se aumentarán los incentivos que reciben los empresarios por contratar a jóvenes. Así lo explicaron ayer parlamentarios del partido conservador en el poder al presentar la proposición de ley que se presentó en el Parlamento y que supone la creación de estas medidas. Se prevé que la cámara legislativa estudie hoy los cambios y que los mecanismos entren en vigor rápidamente operativos.