Peter Murray pilota desde la filial española la expansión exterior
El grupo industrial portugués Camilo Pinto, que fabrica prendas de alta gama para firmas como Carolina Herrera, Scada o Armand Bassi, entre otros, ha encargado a su filial española el desarrollo de su cadena de tiendas Peter Murray. La compañía cuenta actualmente con 23 tiendas en España (de las que cuatro son propias y el resto son franquicias), más siete establecimientos en Portugal.
Según Jorge Martí, gerente de la cadena y director de colección, este año prevén la apertura de 10 tiendas sólo en el mercado español. Pero lo más relevante es el proyecto de internacionalización que tiene la enseña y que proyecta llevar a cabo mediante acuerdos de masterfranquicias con empresarios locales que conozcan el mercado de cada país.
Peter Murray ya ha puesto un primer pie en Grecia, la República Checa y Angola y está en negociaciones con socios potenciales en los países árabes y en Rusia. Su objetivo es cerrar 2006 con más de 30 tiendas en España, 12 en Portugal, dos en Grecia y una en Chequia.
El grupo textil Camilo Pinto decidió lanzar su propia marca en 1986 y en 1999 abre su primera tienda en Alicante de la mano de la empresa española Bonsuces que era su distribuidor para el mercado local.
Dos años más tarde, Bonsuces abordó un proceso para a franquiciar la enseña, primero para España y luego para Portugal.
Acuerdo accionarial
El siguiente paso decisivo en el desarrollo de la marca se produjo hace algo más de año y medio cuando el grupo portugués llegó a un acuerdo con su socio español para adquirir la mayoría del capital e iniciar un ambicioso proyecto de expansión mediante la franquicia. Ahora el nuevo reto es el crecimiento en mercados fuera de la Península Ibérica, según comenta Jorge Martí.
La compañía facturó el año pasado unos 15 millones de euros. La distribución en España generó un volumen de negocio de 2,5 millones en tiendas, es decir, la venta que el distribuidor realiza a la franquicia.
Peter Murray ofrece a sus asociados un sistema mixto, una parte con mercancía en depósito y otra, en venta.