El grupo inversor que lidera Giuliani invierte 35 millones en una planta de biodiésel
La multinacional estadounidense Becco pretende entrar con fuerza en el incipiente mercado español de los biocombustibles. La empresa presentó en Madrid su nueva filial, Becco España, así como un proyecto que ya tiene nombre y apellidos. La compañía construirá una planta de producción de biodiésel en Villaverde (Madrid). La iniciativa supondrá una inversión de 35 millones de euros y generará más de 70 empleos directos.
La planta se pondrá en funcionamiento en la segunda mitad de este año. La producción inicial será de 35.000 toneladas de combustible, aunque está previsto que la capacidad de fabricación llegue a las 128.000 toneladas en 2008. La filial española está participada en un 75% por la sociedad de capital riesgo Giuliani Sage Capital, presidida por el ex alcalde neoyorquino, Rudolph Giuliani. El resto del capital está en manos de la Caja de Burgos, que controla el 20% del accionariado, y el Grupo Antolín, con el 5%.
El biodiésel es un combustible líquido muy similar en propiedades al aceite diésel, obtenido a partir de productos renovables como los aceites vegetales. Bruselas ha fijado como objetivo que, para el año 2010, los biocombustibles supongan más del 5,75% del consumo total de carburantes en la UE. Según el plan español de energías renovables, el consumo de biocarburantes en el país deberá alcanzar un 5,83% en 2010. Esta cantidad equivale a 2,2 millones de toneladas, de las que 1,4 millones serían de biodiésel.
Actualmente se producen en España 250.000 toneladas de biocombustible, una cifra todavía muy lejana de la cantidad propuesta. Para Javier Álvarez-Cascos, director general financiero de Becco, este hecho supone que 'nuestro mercado sea estratégico, con un enorme potencial de desarrollo'.
Becco prevé, en los próximos cinco años, una inversión de más de 140 millones de euros en la construcción y puesta en marcha de ocho plantas de biodiésel en el país, una de ellas en Burgos. La empresa estima que se generarán más de 300 empleos directos y que se producirán 500.000 toneladas al año. La compañía no quiere dar más detalles sobre estas nuevas fábricas porque 'están en distintas fases de ejecución', explica Álvarez-Cascos.
De momento, Becco planea firmar acuerdos de distribución con 'grandes compañías de transporte, flotas de autobuses y cooperativas agrícolas'. 'En el futuro trabajaremos con grandes distribuidoras y pondremos la vista en el comercio al por menor', afirma el directivo.
En las últimos meses, seis empresas nacionales, entre las que destacan el consorcio formado por Repsol YPF y Acciona, así como Ebro Puleva, han presentado varios proyectos para la elaboración de biocombustibles. La inversión total asciende a 612 millones, y supondrá la construcción de 15 plantas, que producirán dos millones de toneladas de combustible.