Trabajo investigará a 200 grandes empresas y sus subcontratas
La Inspección de Trabajo centrará sus actuaciones en materia de salud laboral en vigilar a las 200 mayores empresas del país y a sus subcontratas. La Inspección pretende llegar así a más de tres millones de trabajadores.
Los responsables de la Inspección de Trabajo cerraron el viernes un acuerdo con la patronal y los sindicatos en el que se fijaron los criterios de actuación en materia de salud laboral para este año. Según estos criterios, los inspectores centrarán sus visitas en 200 grandes empresas que tengan presencia en más de una comunidad autónoma y superen los índices de siniestralidad medios de sus sectores.
En concreto, el acuerdo especifica que se elegirán 125 empresas de más de 500 trabajadores y 75 compañías de entre 250 y 500 empleados. Además inspeccionarán otras 75 empresas de entre 50 y 250 asalariados.
La intención del Ministerio de Trabajo, compartida con los sindicatos, es concentrar los esfuerzos de la Inspección en las grandes empresas y sus subcontratas porque de esta manera se conseguirá que las actuaciones afecten a más de tres millones de trabajadores.
Según fuentes de la negociación, esta fórmula permite inspeccionar a muchos más empleados, ya que si se ampliara a más empresas, los inspectores tendrían que visitar a más de 2.000 compañías de sectores con riesgo de siniestralidad 'y eso es irreal y no se cumpliría'.
Sin embargo, la fórmula que se ha escogido es la 'más efectiva y con la que se puede proteger a más trabajadores', indican estas mismas fuentes.
Los sindicatos denuncian que muchas grandes empresas tienen índices de siniestralidad muy bajos 'pero es porque subcontratan precisamente las actividades de mayor riesgo'. Así ponen el ejemplo de algunas empresas de telefonía que subcontratan la instalación o empresas de alimentación que lo que subcontratan la distribución, que son, en ambos casos, las actividades que tienen más riesgo de accidentes.
El protocolo del plan de actuación establece una serie de pautas: las primeras visitas de los inspectores, que empezarán a finales de abril, serán de carácter informativo, después acudirán a las empresas a pedir datos y posteriormente harán una investigación más en profundidad y propondrán las sanciones si fuera necesario.
De momento, estos criterios se mantendrán este año, y una vez visitadas las 275 empresas, los años siguientes se vigilarán otras con altos índices de siniestralidad, pero de menor tamaño. La patronal ha mostrado su oposición a que afecte sólo a las grandes empresas. En su opinión deberían inspeccionarse también las pequeñas empresas que no estén subcontratadas por una grande.
El pasado año la Inspección paralizó 2.212 obras, trabajos o tareas e impuso sanciones por 117,4 millones de euros, mientras que propuso recargos en las prestaciones derivadas de accidentes de trabajo. Según estos datos oficiales, un total de 313.244 trabajadores se vieron afectados por alguna de las 37.949 actas de infracción levantadas en acta. En total, se realizaron 490.603 actuaciones, sólo superadas por el área de Seguridad Social, con 653.432.
El sector de la construcción y el de reforma de fachadas, los más afectados
A finales de abril, la Inspección de Trabajo pretende tener elegidas las 275 empresas que serán visitadas este año. Pero ¿cómo se elegirá el nombre de esas empresas?. Trabajo ya ha detectado los sectores dónde se ubican dichas compañías. Se trata de tres grupos de sectores. Los de mayor siniestralidad de todos son: la construcción de inmuebles, el acabado de edificios y obras (reformas de fachadas fundamentalmente) y la fabricación de productos metálicos para la construcción de viviendas. En un segundo grupo se encuentran, entre otros, los sectores de la fabricación de productos de hierro, de madera o piedra, la agricultura y las actividades veterinarias, las ETT o los transportes terrestres. Finalmente, el tercer grupo está formado por la manipulación de alimentos, la forja, mantenimiento y reparación de vehículos o comercio al por mayor.Tras esta clasificación, la Inspección se pondrá ahora en contacto con la Seguridad Social para preguntarle -en función de las bajas médicas por accidente- qué empresas de estos sectores tienen un índice de siniestralidad mayor que la media de su sector. Así saldrán los nombres.
La Inspección afloró 920 millones de euros impagados a la Seguridad Social
El balance de la actuación de la Inspección de Trabajo el pasado año indica que se realizaron 1,4 millones de actuaciones, en las que se levantaron 100.391 sanciones por valor de 232,5 millones de euros en total. Medio millón de trabajadores se vio afectado por alguna infracción detectada.El número de actuaciones aumentó un 5% respecto al año anterior. A pesar de ello, el número de infracciones detectadas disminuyó un 10% en comparación con 2004 y, en consecuencia, también descendió el importe de las sanciones, un 3,5% menos.Casi la mitad de estas actuaciones se registraron en el área de la Seguridad Social, donde se detectaron 42.938 infracciones; se propuso el alta de 36.932 personas y se recuperaron 920 millones de euros de cuotas impagadas. En segundo lugar se situó el área de salud laboral (con 490.603 actuaciones) y 37.949 infracciones y, finalmente, el área de relaciones laborales (excluidos los extranjeros), donde hubo 95.114 actuaciones. En éste último área, los inspectores obligaron a convertir en fijos, 34.663 contratos temporales de trabajadores que desempeñaban tareas de un empleo indefinido.