Las cajas vascas renovarán cargos con la vista puesta en la fusión
Esta semana comienzan las asambleas que designarán a los nuevos consejeros
La política se puede convertir, de nuevo, en la protagonista para el desarrollo futuro de BBK, Kutxa y Vital. Las tres cajas de ahorros radicadas en el País Vasco comenzarán esta semana la renovación del 50% de sus asambleas constituyentes, con la vista puesta en una fusión que no termina de cuajar por la reticencias encontradas en Álava a un proyecto impulsado y consensuado por los presidentes de estas entidades.
La tarea para encontrar vías de acuerdo que permitan afrontar su fusión no se presenta fácil. Sobre todo si se quiere conseguir el mayor consenso posible. En este trabajo también tiene que aplicarse el Gobierno vasco, que debe modificar la ley de cajas, que ejerce una tutela excesiva sobre estas entidades y que otorga a las instituciones controladas por los partidos políticos una gran relevancia, según aseguran fuentes de estas cajas.
El pistoletazo de salida lo dará el próximo viernes la BBK, que celebrará su asamblea ordinaria, donde se deberán aprobar las cuentas de 2005, y la extraordinaria en la que se renovará su asamblea. En principio, no se presentan demasiados problemas para que el PNV concentre la mayoría de los cargos en el proceso de cambio y que mantenga, por lo menos, su posición actual. La formación nacionalista controla la Diputación Foral y el Ayuntamiento de Bilbao, entidades fundadoras de lo que hoy es BBK, y buena parte de los ayuntamientos de Vizcaya.
En el capítulo de los impositores, el PNV ha logrado también colocar a personas de su influencia. En este escenario, el presidente de BBK, Xabier de Irala, siempre se ha manifestado como un ejecutivo sin carnet de partido.
Así que en lo que se refiere a la entidad de ahorro vizcaína, sus órganos de gestión (asamblea y consejo de administración) mantendrían, tras la renovación, las tesis favorables a abordar la fusión entre las tres cajas.
Reparto de poder
El panorama que se presenta en Kutxa en el proceso de remodelación de su asamblea constituyente es parecido al de la BBK, pero con un reparto de la hegemonía nacionalista en los órganos de gestión. En la actualidad, la coalición PNV-EA, que gobierna la Diputación de Guipúzcoa y gran parte de los ayuntamientos de este territorio, mantiene las posiciones de dominio.
El Consistorio de San Sebastián, controlado por el PSE, ha mantenido una posición favorable respecto de la integración de las tres cajas vascas. En la asamblea extraordinaria que la entidad de ahorro guipuzcoana celebrará el próximo mes -la fecha está todavía por concretar- no se esperan cambios de calado en sus órganos rectores. La reunión ordinaria tendrá lugar el próximo día 31.
El presidente de Kutxa, Carlos Etxepare, tampoco pertenece a ningún partido político. Y, el futuro de esta caja también tiene un panorama amable de cara a la fusión.
Por su parte, Caja Vital ha convocado para el próximo 29 de marzo la celebración de su asamblea ordinaria, que aprobará el balance de 2005. Al día siguiente, se celebrará la reunión extraordinaria para la renovación de los cargos del máximo órgano de gestión de la entidad.
En Álava aparecen los mayores obstáculos a la fusión. En la asamblea anterior, con esa operación en el orden del día, el 20% de los votos, en manos de la Diputación de Álava y el Ayuntamiento de Vitoria, gobernadas por el PP, se opusieron al proyecto, lo que bloqueó un proceso de concentración para el que el presidente de la entidad, el socialista Gregorio Rojo, había reclamado un 'consenso absoluto'. Las cosas no han cambiado para la cita del 30 de marzo. El Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación de Álava han cedido cuatro votos en la asamblea a los miembros de la Plataforma Vital Sí. Este movimiento ha polarizado todas las expresiones de crítica en Álava contra la fusión de las cajas.
La suma del beneficio neto de las tres entidades en 2005 alcanzó los 565 millones, un 22,33% más que en 2004. Por protagonistas, BBK ganó 199 millones (un 28,8% más). Los resultados de Kutxa fueron de 176,1 millones (11,9% de incremento) y los de Vital de 55,83 millones (subida del 9,53%).
Las deudas de los partidos políticos
Los partidos políticos, como los particulares y las empresas, también deben dinero a las cajas vascas. Un repaso a esos datos desvela que el PNV adeuda a Caja Vital un total de 5,6 millones de euros, mientras que el Partido Socialista de Euskadi tiene pendiente de pago otros 1,2 millones. El pasivo de la formación nacionalista con la entidad alavesa está divido en dos partes. Por un lado, una cantidad de 3,8 millones que paga un interés del 4,335%, con vencimiento al 2010 y avalado por una garantía hipotecaria. Y por otro, 1,8 millones de deuda del PNV con Vital que soportan una comisión anual del 3%, liquidable al trimestre y avalado por una garantía personal. Los 1,2 millones que adeuda el PSE-PSOE pagan una comisión anual del 1,5%, también con liquidación trimestral y con garantía personal. Por su parte, BBK contabiliza créditos de 8,5 millones con los partidos vascos. La mayor parte de esta deuda, unos 6,6 millones, corresponde al PNV, y otros 1,25 millones están en el debe del PSE-PSOE. A esta última suma hay que añadir los intereses correspondientes. Por su parte, Eusko Alkartasuna debe a BBK unos 600.000 euros. Los socialistas vascos también tienen pendiente de pago con Kutxa otros 58.000 euros que tienen una garantía hipotecaria.