El beneficio de Sacyr supera las previsiones al subir un 46%
Un año después de la fallida entrada en el capital del BBVA, Sacyr Vallehermoso cambia de tercio en sus planes de expansión y echa el freno a nuevas adquisiciones. El crecimiento vendrá por la vía de lograr más negocio, sobre todo en el área de servicios, donde planea el salto a la gestión privada de aeropuertos.
Mañana hace un año que el consejo de Sacyr votó renunciar a comprar el 3,1% del BBVA para ser máximo accionista. Doce meses después, el quinto grupo constructor y de servicios del país muestra un giro en sus planes de expansión. No habrá 'movimientos corporativos importantes' -lo que excluye adquisiciones en otros sectores-; 'no tenemos previsto comprar ninguna compañía más de servicios' y la expansión internacional se hará 'ganando contratos' en el negocio de servicios y en concesiones.
Son las afirmaciones que hizo ayer el presidente del grupo, Luis del Rivero, con las que parecer dar por cerrado un ciclo. El episodio del BBVA se saldó, además, con unas plusvalías antes de impuestos de 148,7 millones que han tenido su reflejo en las cuentas y en las inversiones, ya que cubrieron en torno al 6% de éstas últimas.
El grupo cerró un ejercicio 'extraordinario', en palabras de su presidente, con un alza del beneficio del 46,4% (413 millones), del 33% en el resultado antes de impuestos, intereses y amortizaciones y del 22% en los ingresos.
Ganar un 25% más
Ahora, la prioridad es crecer en negocio sin adquisiciones. Pese a ello, el grupo prevé aumentar un 25% el beneficio ordinario, más de un 10% el beneficio bruto de explotación y las ventas, algo menos de un 10%.
Aunque tampoco se destierran totalmente las compras si hay oportunidades. Y una de ellas sería la venta por parte de ACS del 50% de la autopista que une Santiago y Valparaíso, en Chile, en la que Sacyr tiene otro 50%. Del paquete de nueve concesiones extranjeras que pueden venderse 'sólo nos interesa ésa', dijo Del Rivero.
El negocio de servicios y de concesiones es el terreno que Sacyr quiere explotar. Y es que los ingresos por las actividades tradicionales (construcción y promoción inmobiliaria) aún suponen el 79% de las ventas y el 47% del beneficio bruto de explotación. Mientras, concesiones y servicios suponen el 8% de la facturación cada una, y la primera pesa el 31% en el Ebitda.
Aunque, individualmente, la división concesionaria, Itinere presenta pérdidas de 48 millones. Esto se explica por la aplicación de un criterio transitorio (está por definir) de las nuevas normas internacionales de contabilidad (NIC), que tienen un impacto negativo en esta filial de 88 millones, según los cálculos del grupo.
En servicios, Sacyr prevé duplicar las ventas de su filial Valoriza tras la compra de Sufi. Además, el grupo está muy interesado en entrar en la gestión privada de aeropuertos. Del Rivero recordó que el presidente del Gobierno 'ha animado a todos' en un reciente discurso a formar parte de la gestión privada. En este terreno, Sacyr ya es accionista del futuro aeropuerto privado que tendrá la región de Murcia.
Aumentar el dividendo, pero no ahora
Dar más dividendo supone destinar menos a crecimiento, y a la inversa. Luis del Rivero, usó ayer el argumento del equilibrio entre estos dos factores para justificar que el dividendo se mantendrá en los niveles actuales. Aunque el consejo propondrá una ampliación de capital liberada para 'recuperar el coste de la inflación', apuntó Del Rivero, quien añadió que en el futuro el dividendo 'puede tender a subir'.Al margen, el contrato para construir en Italia el mayor puente colgante del mundo está sin firmar por la impugnación del consorcio perdedor (Astaldi y Ferrovial). Está previsto que el juez decida en marzo.