Así lo indicó en el Congreso durante la convalidación del Real Decreto Ley por el que se modifican los tipos impositivos del impuesto sobre las labores del tabaco, donde apuntó que el Gobierno "no descarta continuar utilizando el instrumento a su disposición para lograr unos precios del tabaco que desincentiven el consumo". La intención del Gobierno ha sido, desde el principio, evitar el fenómeno del aumento de ventas del tabaco barato; y aumentar la recaudación de las arcas del Estado.
Solbes señaló el Real Decreto Ley tiene como objetivo la reducción del consumo de tabaco principalmente en la juventud, que es el sector más vulnerable al precio del tabaco, aunque asumió que los precios máximos los determinan los fabricantes y no el Gobierno, que se limita a controlar los impuestos.