La Mutua cierra su organigrama tras crear dos nuevas direcciones
La Mutua Madrileña dio ayer por cerrado su organigrama, tras tres años de cambios que han supuesto una auténtica revolución en la compañía. Su estructura y negocio han dado un giro de 180 grados desde que llegó a la presidencia José María Ramírez Pomatta en 2002.
El organigrama aprobado ayer por el consejo, pasa de tener una dirección general a tres. Además, introducirá el área de asesoría fiscal, dependiente de Pomatta. Las dos nuevas direcciones generales son la de área aseguradora, de la que será responsable Flavia Rodríguez Ponga, hasta el momento directora general adjunta de Negocio, y la de organización y desarrollo, que estará dirigida por Rita Panero, hasta ahora encargada de la dirección de Organización.
Ambas direcciones se unen a la ya existente de área financiera, encabezada por Miguel Ángel Taús, que incorporará entre sus competencias 'la gestión de los servicios e inversiones materiales' como, por ejemplo, la gestión patrimonial de Mutua Madrileña.
La nueva dirección general del área aseguradora contará con una subdirección general de prestaciones, a cargo de Javier Gonzálvez, hasta ahora director de asesoría jurídica, y otra dedicada a salud, dirigida por Álvaro Martínez-Arroyo.
La Mutua Madrileña también ha fichado al abogado del Estado Luis Bermúdez y a Ernesto Mestre, que ocupaba el cargo de subdirector general de Inspección Territorial de la Agencia Estatal de Administración Tributaria. Bermúdez es ahora director de asesoría jurídica de la mutua, mientras que Mestre se incorporará como director del área de asesoría fiscal.
Seguros Bilbao
Por otra parte, el director general de Catalana Occidente, Francisco José Arregui, compatibilizará su actual cargo con la presidencia de Seguros Bilbao, compañía absorbida por el grupo catalán en noviembre de 2003. Arregui sustituirá a Luis Terradillos, quien fue nombrado en abril de 2004 y acaba de jubilarse.