Pasarela Barcelona desafía a Cibeles en su primera edición
Pasarela Barcelona ya ha movido ficha. Ahora le toca el turno a la consagrada Cibeles. La nueva cita de la moda en Barcelona bajó ayer el telón aprobando un examen que sólo ha tenido 45 días para preparar: los mismos que han pasado desde que el responsable de la anterior Pasarela Gaudí, Paco Flaqué, dimitiera.
En un ambiente de incertidumbre, un grupo de fieles a Gaudí volvieron a entusiasmar al público con sus creaciones para la próxima temporada de invierno 2006-2007. Antonio Miró fue fiel a su porte sobrio, Totón Comella a su lencería sencilla o Hannibal Laguna a su toque de glamour. La Pasarela, en la que no han faltado las caras conocidas como los top Nieves Álvarez o Andrés Velencoso, también ha traído algunas sorpresas. La primera llegó de la mano de Miriam Ocariz. La responsable de la colección de mujer de Armand Basi hizo pública su decisión de abandonar la firma para centrarse en su propia marca. La otra vino de parte de Konrad Muhr, que anunció su intención de desfilar en Londres y crear una línea de ropa infantil.
Las creaciones más visuales de los dos días de desfiles llegaron de la mano de Hannibal Laguna, que presentó la colección For ever, exclusiva para noche y grandes fiestas. Sin olvidar el color rey por excelencia de toda celebración nocturna, el negro, se atrevió también con el salmón. Durante la jornada de ayer, la Pasarela concentró las ideas más originales.
La mañana comenzó con las propuestas para hombre de Luxoir. Para esta firma, el hombre debe ser atrevido, juvenil y arriesgarse a llevar prendas plastificadas. El contraste de estampados, colores y tejidos fue la tónica dominante de una colección muy moderna. A la última fue la presentación de Txell Miras, que toma el vanguardismo más extremo como sello de identidad. Lo más curioso, prendas de las que cuelgan fotografías de cuerpos desnudos que recuerda a la iconografía de Davildelfín. Provocador se mostró Konrad Muhr, que apuesta por líneas que fusionan la estética deportiva con detalles militares.
Por su parte, Sita Mur se decantó por un estilo más romántico, donde predominaron los pantalones cortos y las chaquetas de lana y Custo Barcelona mostró en la capital catalana sus peculiares estampados que han dado la vuelta al mundo.