Los partidos aceleran la negociación para intentar cerrar un pacto global esta semana
El PSOE ha convencido a sus principales socios parlamentarios en Cataluña y en Madrid de la necesidad de cerrar esta misma semana las principales aristas del Estatuto con el fin de que antes del sábado se conozca si puede prosperar o no la reforma llegada al Congreso el pasado mes de octubre.
Con este calendario, los partidos que se reunieron ayer tarde en Barcelona acordaron viajar hoy a Madrid para celebrar en el Congreso un cónclave que, previsiblemente y con las lógicas interrupciones, durará hasta el próximo viernes. Hoy piensan ultimar los acuerdos sobre el amplio capítulo de competencias y mañana abordarán el de la financiación, a partir del último documento remitido por Economía a las formaciones involucradas en la negociación.
En todo caso, todas las partes son conscientes de que la negociación no habrá terminado, pues disponen hasta febrero para limar las diferencias que persistan sin la presión de los medios de comunicación que soportan ahora los negociadores.
Los técnicos de los partidos catalanes, tras la reunión de ayer en Barcelona, insisten en reclamar la competencia exclusiva para la Generalitat en materia de organización y régimen jurídido de las cajas de ahoro y mutuas, y admiten compartirla en inspección, informa T. Garganté.
La urgencia del Gobierno por acabar con la incertidumbre y definir los límites precisos de los grandes ejes del Estatuto no tiene que ver sólo con la celebración el próximo sábado del comité federal del PSOE, integrado por dos centenares de dirigentes con plena libertad para emitir sus opiniones. El presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, también aspira a pasar página cuanto antes a esta negociación para introducir en la agenda política otros asuntos como la reforma fiscal, la ley de Dependencia o le ley de Igualdad. El debate estatutario ha provocado un cierto desgaste político al Gobierno y al PSOE que en La Moncloa se confía en frenar de forma paulatina a partir de febrero, en cuanto Cataluña deje de concentrar buena parte de la actualidad política.
ERC e Iniciativa, socios del PSC en el tripartito catalán, han llegado también a la conclusión de que no les favorece mantener abierta la negociación tanto tiempo, pues les impide atender la gestión.