Dimite el coreano que falseó su labor con células madre
El profesor Hwang Woo-suk anunció ayer su dimisión después de que la Universidad Nacional de Seúl confirmara que el célebre científico manipuló los datos de la supuesta clonación de embriones humanos. Hwang, considerado un héroe en Corea del Sur por sus anunciados logros científicos, que abrieron la esperanza de cura para enfermedades como el sida, la diabetes o el parkinson, hizo referencia al 'enorme impacto y decepción' causados y renunció a su puesto en la universidad.
Horas antes de la dimisión del científico, el comité universitario que investiga el caso informó de que el profesor manipuló 'de forma intencionada' los datos para mostrar que había logrado producir once células madre de embriones humanos clonados de un paciente, mientras que en realidad sólo obtuvo dos células.
El profesor, de 52 años de edad, reafirmó la veracidad de que su equipo posee tecnología para crear células madre de embriones humanos clonados y aseguró que lo podrá probar. Sin embargo, la reputación del científico surcoreano ha caído en picado después de haber ocupado un lugar eminente en el mundo de la ciencia con su estudio publicado en 2004 en la revista Science, según el cual clonó por primera vez en la historia embriones humanos y extrajo células madre.
Expertos locales han atribuido el engaño a la fuerte presión por mostrar algo más avanzado que su estudio publicado en 2004, ya que ese texto era poco apto para aplicaciones industriales, pues no conducía a la cura de enfermedades. Con el estudio presentado en mayo de este año, Hwang mejoró sustancialmente la creación de células madre de embriones humanos clonados y el científico logró que se creara en Seúl el Centro Internacional de Células Madre.
Otros analistas atribuyeron el escándalo a la manía de la sociedad surcoreana por 'hacerlo todo deprisa' y la tendencia en este país de 'perdonar mentiras con tal de que se obtengan resultados importantes'. Los analistas señalan también la responsabilidad de los medios de comunicación surcoreanos por haber convertido al profesor en un héroe nacional, frenando la crítica hacia un personaje admirado.
Las investigaciones fueron iniciadas para determinar tras análisis de ADN si las dos células obtenidas eran en realidad células madre de embriones humanos clonados, y confirmar si el equipo surcoreano posee la tecnología para esos avances.
La decana de la universidad, Roh Jung-hye, condenó la manipulación realizada por Hwang como 'un acto grave que afecta de forma negativa a los fundamentos de la ciencia'.