Las recetas tradicionales también funcionan como comida rápida
Varias empresas andaluzas han decidido hacer frente a los restaurantes de comida rápida a través de la cocina mediterránea y casera. Ofrecen ventajas como la atención rápida, raciones generosas o el buen precio, pero con recetas tradicionales de la tierra, muy lejos de las hamburguesas norteamericanas o de las grandes cadenas de pizza que inundan todo el país.
Una de estas iniciativas se encuentra en la capital cordobesa. Odre y Hogaza es un establecimiento que abrió sus puertas hace ahora tres años y que ofrece distintos productos a todas horas del día. El cliente puede desayunar, almorzar, cenar, merendar y hasta tomar un aperitivo por lo que cubre el número de horas de un restaurante de comida rápida tradicional. 'El objetivo es servir comida en poco tiempo, pero de calidad, donde la gente vea lo que se está comiendo en cada momento', subraya el director general de Odre y Hogaza, José Manuel del Toro. Y es que la cocina de este establecimiento, a la vista del público, se basa en la tradición de preparar los alimentos sobre las brasas. Para ello se emplean los hornos de fundición más modernos del mercado, aunque alimentados con leña. Las parrilladas, los panecillos de aceite de oliva y las tapas tradicionales a base de carne, pescados, quesos y embutidos son sus productos estrella.
El negocio ha estado dirigido desde el primer día a convertirse en un sistema de franquicias que llegue a distintos lugares de España, una iniciativa que arrancó el pasado febrero y que ha hecho que cuenten ya con unos 12 acuerdos firmados. 'Antes de final de año está previsto que abran sus puertas otros establecimientos de Odre y Hogaza en Aranjuez, æscaron;beda y otros dos en Córdoba, aunque también hemos firmado contratos en otros lugares como Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla o Huelva', asegura Del Toro.
Sevilla acogió hace ahora tres meses la apertura de un nuevo establecimiento en el que la especialidad son los huevos fritos con patatas. Eggsmile es la gran apuesta de una empresa familiar que decidió montar el negocio porque no había una oferta parecida en los locales de restauración de la capital andaluza. Este restaurante está algo más lejos de lo que es un fast food a la antigua usanza, ya que tiene un precio medio más alto y el servicio es mesa por mesa. Sus competidores directos son, entre otros, los establecimientos de comida mexicana, americana o italiana.
'Es una idea que se nos ocurrió hace ya un tiempo y que se basaba en la creación de un restaurante de comida casera y mediterránea, que se acercara a los locales de comida rápida y que se situara entre los dos conceptos', afirma Antonio Ocaña, director de la enseña sevillana. Al igual que sucediera con la empresa cordobesa, Eggsmile se diseñó como una franquicia y, de hecho, está pendiente de abrir dos nuevos locales en la capital andaluza. 'Franquiciar lleva un tiempo y, aunque tenemos varias ofertas, lo primero que queremos es consolidar este establecimiento', señala. Además de los huevos con patatas, ofrece otros platos de la cocina mediterránea como ensaladas, salmorejo, migas o revueltos.