La constructora Brues prevé crecer al 15% sin caer en la 'moda' de la diversificación
Reducir el peso del negocio tradicional de la construcción en sus ingresos es la preocupación de todas las grandes del sector y cada vez de más medianas. Brues y Fernández es una excepción. 'Nosotros estamos centrados en la construcción, donde aún hay mucho recorrido y no hemos pensado en diversificar más allá de otras áreas muy ligadas al negocio constructor', explica Jacobo Roa, consejero delegado de Brues y Fernández.
La previsión es poder crecer en el entorno del 15% en facturación, lo que significaría llegar a los 300 millones al cierre del año y acercarse a los 350 millones el próximo ejercicio. En beneficio bruto, la cifra prevé duplicarse este año y alcanzar 12 millones.
Tras adquirir la compañía Fernández a OHL en 2002, Brues la fusionó con su división constructora. Es la pata principal del grupo, que se completa con una inmobiliaria y una filial de gestión del suelo, Gesai, además de otras pequeñas sociedades.
Roa ve el afán por diversificar que vive su sector casi como 'una moda'. 'Son ciclos; hoy eso está muy valorado pero mañana puede ser que vuelva el 'zapatero a tus zapatos', no sé si en las grandes pero quizá en las de tamaño medio'.
Este ingeniero de caminos pilota una empresa que, como todas las medianas pese a estar lejos en tamaño de los gigantes, participa en grandes obras. Ahora tiene contratos en seis aeropuertos (Barcelona, Sabadell, Reus, Córdoba, Tenerife Sur y Fuerteventura) y tras adquirir una tuneladora a Duro Felguera la prepara para empezar el próximo año el gran proyecto de carretera que será la alternativa al puerto de Pajares, el nexo entre León y Asturias. Una gran inversión en maquinaria que podrá reutilizar en posteriores contratos. æpermil;stos son sólo algunos ejemplos en una cartera de obras pendientes por 600 millones.
Entre los posibles proyectos por adjudicar, el concurso para construir y gestionar el hospital de Burgos al que opta con otras rivales, Hispánica y Sando. Brues se presenta como constructora aunque no se cierra al negocio de concesiones, pero siempre asociadas a la construcción.
¿Crecerá con compras o fusiones? Se lo plantea si surgen oportunidades en áreas donde quiere crecer, como Cataluña, donde quiere potenciar una delegación. Pero 'el tamaño no nos obsesiona'.
Gestionar suelo para lograr obras
Mantener suelo en cartera representa un seguro para lograr futuras obras. Y esto es lo que aporta la gestora de suelo Gesai a Brues y Fernández. En torno al 35% de lo que ha edificado este año procede de proyectos en suelo conseguido previamente por la filial del grupo. 'Y hay otros por 400 millones pendientes de anotar', explica el consejero delegado, Jacobo Roa. El grupo compra suelo cuando ni siquiera está calificado y luego trata de impulsar proyectos. Presenta, por ejemplo, a un ayuntamiento un plan para urbanizar polígonos industriales en desuso. Luego edifica miles de viviendas. Los últimos ejemplos son los contratos para urbanizar dos polígonos en Sanxenxo (Pontevedra) y en Torrejón de Ardoz (Madrid) por 17 millones.