Mutua Madrileña invertirá 500 millones en una ciudad sanitaria
La aseguradora invertirá 500 millones en un centro en la capital La Mutua Madrileña planea la construcción de una ciudad sanitaria en Madrid cuya inversión se estima cercana a los 500 millones de euros. Las aspiraciones de la aseguradora, que ha revolucionado su política de inversiones, pasan por convertirse en una de las tres primeras sociedades en el ramo de salud y liderar la investigación médica a nivel europeo.
La transformación de Mutua Madrileña va más allá de lo inicialmente previsto. La aseguradora no aspira sólo a diversificar su negocio, centrado hasta ahora en el seguro del automóvil, o a salir de su tradicional feudo madrileño, sino que pretende dar un golpe de mano en el sector de la asistencia sanitaria. Bajo la presidencia de José María Ramírez Pomatta, impulsor de la transformación que atraviesa la entidad, la Mutua proyecta la creación de una ciudad sanitaria que se sitúe en la vanguardia de la asistencia social y la atención a la dependencia.
El presidente de la Mutua lo advirtió tras el apretón de manos al cierre de la adquisición de Aresa la semana pasada. La compra por 350 millones de la entidad catalana especializada en seguros de salud fue sólo la 'punta de un iceberg, y el primer paso de lo que será el gran proyecto de la Mutua'.
Está previsto que la ciudad sanitaria, actualmente en fase inicial, se presente en junio del año que viene, pero el proyecto pasará necesariamente por la adquisición de terrenos y edificios en la capital. Fuentes de la aseguradora estiman que la inversión requerida se situará en torno a los 500 millones de euros. Esta cuantía podría ser absorbida con los recursos propios no comprometidos de la entidad, que ascienden a 1.543 millones de euros, una vez descontada la compra de Aresa.
La aseguradora lidera el ránking de solvencia de entidades de seguros, seguida de Mapfre Mutualidad, y hasta ahora no ha acudido a financiación externa para dar cobertura a las inversiones que ha llevado a cabo.
La creación de la ciudad sanitaria, además, va más allá de la asistencia hospitalaria. El proyecto aspira a convertirse en centro médico y de investigación oncológica de referencia a nivel europeo. De hecho, Ramírez Pomatta ha sido el principal impulsor de la Fundación de Investigación Médica de la Mutua, una entidad que tendrá un papel esencial en el nuevo proyecto. 'El crecimiento futuro vendrá de la mano del desarrollo de los servicios en torno a la salud', ha señalado Pomatta en diversas ocasiones.
Objetivo 2010
Con este impulso, la aseguradora consolidará su apuesta por el ramo de salud. El objetivo es alcanzar en 2010 uno de los tres primeros puestos del ránking de sociedades médicas, actualmente liderado por Adeslas, Sanitas y Asisa.
Con la compra de Aresa, la primera adquisición que realiza la aseguradora en su historia, se dio un primer paso para entrar en los seguros sanitarios y no se descartan realizar más compras 'si fuera necesario'. Sin embargo, desde la entidad se afirma que el propósito principal es integrar la entidad catalana, antes de afrontar nuevas operaciones.
La adquisición de Aresa le permite a Mutua Madrileña posicionarse en 21 provincias y sumar 517.000 clientes a los actuales 1,8 millones de mutualistas, lo que supondrá un potente impulso para la venta cruzada de productos.
El ramo de salud gestionó en su conjunto 2.128 millones de euros en primas en los seis primeros meses del año, según las cifras de Icea.
La entidad pedirá un consejero en ACS
El giro en las inversiones financieras de Mutua Madrileña han supuesto una revolución en el tradicional sector asegurador. El objetivo ha sido situarse en sectores clave del panorama financiero y la diversificación sectorial parece satisfacer a Ramírez Pomatta. Ahora bien, la entidad no descarta ampliar sus últimas operaciones financieras.De hecho, la aseguradora apuesta por elevar hasta el 2% ó 3% su reciente inversión del 1,14% en ACS. æpermil;sta le supuso un desembolso de 98,5 millones. Mutua Madrileña aspira además a sentarse en el consejo de la constructora, aunque no tiene intención de tomar partido en la gestión de la compañía, pero sí 'vigilar su inversión financiera'. La Mutua se ha convertido en el cuarto accionista de ACS por detrás de Banca March, Alberto Cortina y Alberto Alcocer y el presidente Florentino Pérez.El giro inversor de la Mutua se inició en abril de 2004 con la alianza con Repsol y más aún con la entrada en el Santander tras la adquisición del 1,2% por 531 millones. La Mutua situó a Luis Rodríguez Durón en el consejo de esta entidad. La política de diversificación le ha llevado, además, al sector inmobiliario con la compra del 10% en Inmobiliaria Colonial, una operación de 352 millones que le sitúa como segundo accionista tras La Caixa. La Mutua ostenta dos puestos en el consejo de Colonial.