El diálogo se rompe en Seat
Seat y los sindicatos rompieron ayer la negociación por las prejubilaciones para los 950 empleados de 58 y 59 años. La empresa consideró que el coste de 150 millones de euros era muy elevado y decidió suspender el preacuerdo que reducía el ajuste a la mitad. El expediente se mantiene para 1.346 personas.
La dirección de Seat y los sindicatos rompieron las conversaciones ayer en la última reunión, once horas antes que expirara el plazo. La sensación de fracaso podía palparse en ambas partes, porque se estaba muy cercad de un acuerdo global. La empresa se había comprometido el viernes a estudiar las prejubilaciones de 58 y 59 años y a presentar en la reunión de ayer el plan social para los 700 afectados del expediente, una vez reducido a la mitad el ajuste inicial a través de cinco medidas de flexibilidad.
Los sindicatos plantearon en la reunión de ayer una propuesta común de prejubilación para los 950 trabajadores de 58 y 59 años, con un coste estimado de 150 millones de euros. La filial de Volkswagen mantuvo su negativa a este plan. Y este fue el detonante de la ruptura, tras tres horas de reunión, con presencia del mediador de la Generalitat catalana, Javier Suquía. En un comunicado, la empresa justificó 'la imposibilidad de afrontar el excedente de plantilla mediante prejubilaciones a partir de los 58 años debido a que se trata de una solución inviable por causas sobre todo organizativas, además de económicas'. El propio Ministerio de Trabajo ha anunciado recientemente que endurecerá este tipo de prejubilaciones tan tempranas y llevará a los tribunales su abuso.
Finalmente, la compañía que preside Andreas Schleef decidió unilateralmente desactivar todas las medidas pactadas el viernes pasado y mantener el expediente global para los 1.346 empleados. De esta forma, quedó sin efecto el paquete de 216 personas que se apuntaron a un plan de bajas y excedencias voluntarias, la suspensión de contratos de 63 años, la ampliación de la bolsa de horas en cinco días (más la condonación de otros cinco días) y algunas prejubilaciones puntuales para los trabajadores de 60 y 61 años que no se hayan acogido al contrato relevo. Este conjunto de medidas alcanzaba un coste total de 200 millones y reducía el expediente hasta los 690 trabajadores.
Consolidar inversiones
Los representantes sindicales, que se negaron a negociar un plan social para los afectados en el ajuste y reconocieron que sus propuestas eran un 75% más caras que las de la empresa, lamentaron la situación creada, especialmente para las inversiones de 700 millones anunciadas por la compañía, y que dependían de un acuerdo global en el expediente, según puntualizó la compañía la semana pasada. El presidente del comité de empresa señaló que 'estas inversiones son básicas para el futuro de la empresa a medio y largo plazo'.
Los sindicatos (UGT, CCOO y CGT) plantearán nuevas movilizaciones a partir del lunes 12 de diciembre (hasta el momento se han convocado dos huelgas de 24 horas el 10 de noviembre y el pasado 1 de diciembre), porque la semana que empieza hoy trabajará sólo el 34% de la plantilla. æpermil;ste es otro punto de fricción con la empresa, que decidió declarar festivos hoy, el miércoles 7 y el viernes 9 para ajustar las existencias. Los sindicatos aseguraron que denunciarán a la empresa por esta decisión ante la Inspección de Trabajo, porque supondrá ampliar la bolsa de horas que ya está agotada.
La Generalitat decidirá en los próximos 15 días
El departamento de Trabajo e Industria de la Generalitat de Cataluña emitió un comunicado en el que también lamentó la falta de acuerdo entre las partes. La nota critica que la empresa no hubiera querido prolongar el plazo de negociaciones de 30 días que terminaba ayer y de forma velada la actitud de los sindicatos por no haberse negociado 'las posibles extinciones forzosas para conseguir un acuerdo global'. La administración catalana no se limitará a realizar su dictamen sobre el expediente en los próximos 15 días, sino que mantendrá reuniones con la empresa y los sindicatos, la primera esta semana. Los sindicatos pedirán a la Generalitat que tenga en cuenta la lista de bajas y excedencias voluntarias, y argumentará que Seat no podrá fabricar los 429.000 vehículos previstos para 2006 con 1.346 trabajadores menos.