Las eléctricas recurrirán si no reciben todo el déficit de tarifa
Las eléctricas acudirán a los tribunales si el Gobierno no les reconoce el déficit de tarifa. Las empresas, en un clima de enfrentamiento soterrado, confían en un compromiso oficial antes de aprobar sus cuentas anuales, en febrero.
Las empresas eléctricas se muestran convencidas de que Industria no puede oponerse al reconocimiento del déficit de tarifa, que puede alcanzar los 3.600 millones este año, porque hay precedentes legales que apoyan sus tesis. Sin embargo, de ser así, iniciarán su particular batalla jurídica en los tribunales, según reconocen fuentes de las empresas.
En estos momentos, lo que más les preocupa es obtener la aprobación del Gobierno antes de que se aprueben sus cuentas anuales, en febrero, aunque 'el cobro se aplace a alguna revisión tarifaria posterior', indica una eléctrica. Con el compromiso oficial del Gobierno, el sector podrá auditar, con salvedades, unos resultados que, con déficit o sin él, serán sustanciosos.
Con todo, el déficit forma parte de una dura batalla que se libra en torno a las tarifas de 2006 y que enfrenta a Iberdrola con el resto de sus competidoras. A través de Unesa, el sector ha remitido una propuesta de subida suscrita por todas las empresas, excepto Iberdrola. Según fuentes cercanas a la patronal, la propuesta apunta a una subida del 10% para el próximo año, con posibilidad de laminar este incremento en años venideros, para los cuales se dejarían subidas por debajo del IPC.
Sin embargo, y éste ha sido el motivo de la disputa, las empresas proponen alguna modificación del mercado mayorista (pool) para compensar la parálisis de las reformas provocada por la opa sobre Endesa. Concretamente, ofrecen sacar de ese mercado la producción hidráulica y nuclear (que tienen costes variables cero), para evitar beneficios sobrevenidos, y que se reconozca los costes reales a las centrales térmicas. Iberdrola se opone a esta medida y, por supuesto, a no cobrar el déficit que le correspondería (más de mil millones), pues, de no recibirlo, su resultado podría bajar más de un 50%. En la eléctrica quitan importancia a la posición de Industria y confían en que ésta sea modificada por Economía.
La apuesta del sector es que la tarifa registre una subida del 4% (sin incluir el déficit), que se justificaría con medidas como el plan de eficiencia energética, el de energías renovables o la internalización de la gestión del coste de residuos nucleares.
Una decisión con una lectura política de la opa
Fuentes del sector eléctrico consideran que la decisión del Gobierno sobre las tarifas y sobre el déficit 'va a tener una lectura política inevitable sobre la opa'. El hecho de que Endesa recupere o no, y cuándo, una desviación que, en su caso, podría superar los 1.500 millones de euros, tiene un primer efecto sobre su resultado neto. A continuación, como derivada, sobre su política de dividendos (ha prometido pagar 2.000 millones, sobre los 2.760 millones de beneficios que espera en el ejercicio), 'y sobre la propia rentabilidad de la oferta de Gas Natural', indica un experto.También la decisión que se adopte sobre la tarifa eléctrica tendrá un claro efecto respecto a la confianza de los inversores en la estabilidad del sector, y sobre la valoración que los mercados puedan hacer de la eléctrica opada, indican las mismas fuentes.