Despega el mercado de futuros del aceite
La escalada de precios que sufre este año el sector del aceite de oliva, que ha superado en origen los cuatro euros por kilo debido al previsible recorte de producción del 30%, está favoreciendo la reactivación del Mercado de Futuros del Aceite de Oliva (MFAO) de Jaén. El proyecto, impulsado por la Junta de Andalucía, se puso en marcha a primeros de 2004 sin lograr una actividad significativa en su primer año de actividad debido a la desconfianza del sector. Sólo se negociaron 16.000 contratos -de una tonelada cada uno-, frente a una capacidad de 200.000.
Ahora, sin embargo, productores y también envasadores empiezan a tomar conciencia de la utilidad de este instrumento para controlar precios y dar estabilidad y transparencia al sector, según explica Antonio Martín Mesa, responsable del proyecto. Mesa explica que la alta volatilidad de este año ha llevado a deshacer muchas operaciones del mercado tradicional porque los precios pactados se colocaban muy lejos del valor real del aceite cuando llega el vencimiento. Además, los envasadores corren el riesgo de no poder servir a la gran distribución a los bajos precios convenidos.
El negocio se triplica
El incremento de precios en las cotizaciones del propio MFAO se acerca al 50%, mientras que supera un 70% interanual en el mercado tradicional. Este escenario permitirá que el mercado de futuros alcance este año sus previsiones de 50.000 contratos -tres veces los registrados en 2004-, más de 100 clientes y unos 157 millones de euros de volumen de negocio. A primeros de noviembre ya se contabilizaban 40.300 operaciones. El despegue debe intensificarse el próximo año hasta los 120.000 contratos para alcanzar el punto de equilibrio, que se sitúa en los 140.000 contratos, en 2007.
El proyecto se habrá consolidado cuando consiga movilizar el 10% de la producción media, que se sitúa en 1.300.000 de toneladas. Este año se espera una cosecha nacional de entre 650.000 y 900.000 toneladas. A ello se une un consumo que supera estas cifras y unos excedentes muy cortos procedentes de otras campañas.
De cara al futuro, Antonio Martín Mesa admite que el MFAO debe afrontar su internacionalización, dada su condición de único mercado mundial de futuros de aceite de oliva. Además el MFAO ha impulsado una reforma legal para que puedan entrar creadores de mercado que den liquidez, como el grupo Sos, que cada día aporta aceite a las cotizaciones en calidad de único socio industrial.
Las cooperativas productoras de Andalucía, que recelaban del mercado en el inicio del proyecto, empiezan ya a poner su aceite en juego, según confirma Antonio Luque, primer directivo de la firma Hojiblanca y responsable de este sector dentro de la federación española. 'A los productores nos interesa un precio estable todo el año y por eso trabajamos para que el mercado de futuros funcione, pero necesita más liquidez y más operadores', opina Luque, que estudia colocar a Hojiblanca como creador de mercado. De los 111 clientes que tiene ahora el mercado de Jaén, el 29% son almazaras y el 31% cooperativas. La industria envasadora, que integra el 40% restante, también cree que el MFAO necesita más implicación del sector. Algunos envasadores atribuyen el movimiento de las cotizaciones 'a los mismos intermediarios que especulan con el precio en el mercado real'.
Importar y contener la demanda
La UE se está planteando aprobar la apertura de un contingente de importación de aceite de oliva procedente de terceros países para contrarrestar el alza de precios. La eventual medida, reclamada y apoyada por la industria, es contemplada con temor por los productores, que temen un desplome de los precios. Pero la Comisión Europea se mantiene alerta y vigila la evolución del mercado comunitario del aceite de oliva. Los altos precios en origen, que tienen menos eco en el valor final, se podrían trasladar masivamente al consumidor en diciembre, según las estimaciones que hacen fuentes de la industria. Las grandes marcas que surten a la distribución, que por sus estocajes mantienen bloqueados los precios en 3,90 euros por litro desde septiembre a pesar de la escalada en origen, podrían aplicar dentro de un mes una tarifa final de 4,60 euros por litro. Con estos precios, añaden la fuentes, se podría producir una rebaja del consumo que aliviaría tensiones. Porque el sector, con una demanda disparada, durante las cosechas cortas muere literalmente de éxito.