Telefónica compra la operadora británica O2 por más de 26.000 millones de euros
La mayor operadora española se dispone a adquirir a su competidora británica O2 por 17.700 millones de libras, más de 26.000 millones de euros. Telefónica, que entra de este modo en dos de los mayores mercados de móvil de Europa (Alemania y Reino Unido), pagará 200 peniques por acción, una prima de 22% por encima del precio de cierre de O2 el pasado viernes. Esta es la mayor operación realizada nunca por una empresa española en el extranjero. Alierta ha comparecido esta mañana para destacar que la operación mejorará todos los márgenes de la compañia. A las 14.00 horas, se levantó la suspensión de cotización de ambas compañías. Telefónica perdía el 2,42% y la británica subía el 0,08%.
O2 mantendrá su nombre y su gestión, cuando concluya la compra, que se espera para principios del año 2006, según informaron hoy los directivos de ambos grupos, que han comparecido para explicar los detalles de la operación.
César Alierta afirmó que se trata de una oferta firme y atractiva y no dio importancia a la subida que está experimentando esta tarde el precio de las acciones de O2 en el mercado de Londres. Consideró que la oferta incluye un precio muy correcto y que la operación está sujeta a conseguir el 90% de las acciones de O2.
Directivos de O2 en el consejo de Telefónica
A la conferencia de prensa en la sede de Telefónica en Madrid también asistieron el presidente de O2, David Arculos, y el consejero delegado de este grupo, Peter Erskine, que pasarán a formar parte del consejo de administración de Telefónica. Erskine será, además,miembro de los comités ejecutivo y directivo.
Telefónica quiere mantener la marca de O2 y no unificarla como hizo con sus operadoras bajo la marca MoviStar, porque es O2 "fantástica" y que el equipo de gestión del grupo británico es "fenomenal".
Sobre el papel que Telefónica Móviles tendrá en la operadora británica, dijo que se informará cuando concluya la operación. El presidente de O2, David Arculus, dijo que la base del grupo seguirá en el Reino Unido. Esta empresa, que nació de la escisión de BT en 2001, es la segunda operadora de telefonía móvil del Reino Unido, la tercera de Alemania, donde ha conseguido un tercio de sus clientes en el último año, tiene en Irlanda 1,5 millones de clientes y, además, cuenta con un operador de telefonía móvil de servicios de urgencia en el Reino Unido, Airwave.
Los benefcios para Telefónica
Alierta explicó que la operación "convertirá a Telefónica en el operador europeo de mayor crecimiento", permitirá la creación de valor desde el primer año tanto desde el punto de vista de la acción como de beneficios y generación libre de caja.
La operación, añadió, permitirá duplicar las compras de terminales y equipos en Europa, multiplicará por 3,8 la posibilidad de acceso a población europea e incrementará el poder de compra de contenidos.
Hizo hincapié que producirá unas sinergias de 3.300 millones de euros y unos ahorros de 300 millones. Alierta explicó que para un operador lo más importante no es el tamaño sino las economías de escala, que se traducen en mejores servicios para el cliente, con reducción del precio de los terminales y mayor eficiencia de los servicios.
Añadió que, con esta adquisición, Telefónica reequilibra la cartera al ampliar su presencia en la telefonía móvil, el sector que más crece en el mercado.
O2 cuenta con 24,6 millones de clientes, unos ingresos de 9.800 millones de euros y un ebitda (resultado operativo bruto) de 2.600 millones de euros.
El director financiero de Telefónica, Santiago Fernández-Valbuena, explicó que la operación se financiará con deuda y que para ello cuenta ya con un crédito puente de 3.600 millones de euros, en condiciones muy favorables.
La presentación del documento de la oferta se realizará a mediados del mes de noviembre y se espera cerrar la operación en enero de 2006 ya que estiman que no presenta riesgos reguladores al tratarse de mercados complementarios
El acuerdo pone fin a semanas de conjeturas sobre la venta de O2, que ha sido centro de interés de otras empresas, como la alemana Deutsche Telekom y la holandesa KPN. El anuncio de hoy es la culminación de los esfuerzos de la compañía española, con base en Madrid y la quinta compañía de telecomunicaciones por valor de mercado, por conseguir una expansión en Europa después de concentrarse durante años en la construcción de sus negocios en América Latina.
Juego de alianzas
La adquisición de O2 por Telefónica hace que se tambaleen de nuevo las frágiles alianzas entre operadoras que se crearon en 2003 para optimizar recursos. France Telecom, integrada en la alianza FreeMove -formada por Orange, Telefónica Móviles, Telecom Italia Mobile y T-Mobile-, adquirió Amena.
Esta última formaba parte de Starmap Mobile con O2 en Alemania, Reino Unido e Irlanda, ONE (Austria), Pannon GSM (Hungría), Zuñirse (Suiza) Telenor (Noruega) y Wind (Italia). Y ahora ha sido Telefónica la que adquirido una operadora de la otra alianza. Esta operación no parece la última, pero su carácter estratégico es la más importante que se ha producido en los últimos meses en el sector.