_
_
_
_
CincoSentidos

Más de 1.700 barcos en Barcelona para los aficionados a al naútica

El salón náutico arranca este fin de semana, aunque la muestra flotante se inaugurará el miércoles 26

Un escaparate de más de 1.700 barcos, además de cualquier cosa que pueda ser útil en medio de la mar. Eso es lo que el aficionado a la náutica puede encontrar desde este fin de semana hasta el 30 de octubre en una de las mayores exposiciones dedicadas al mundo marino de Europa: el Salón Náutico de Barcelona. En los tres pabellones de Gran Vía M2 se exponen unas 1.500 embarcaciones en seco y otras 230 de gran eslora en la muestra flotante en Port Vell, aunque para estas últimas habrá que esperar hasta el próximo miércoles. Como explica Jordi Montserrat, director del salón, 'este retraso se debe a problemas de fechas que han impedido que los barcos, que en su mayoría vienen de Génova donde se acaba de cerrar su salón náutico, pudieran llegar a tiempo'.

Como Montserrat resalta, este año se produce un crecimiento importante hasta alcanzar los 600 expositores y una previsión de 175.000 visitantes. En la parte seca se aumenta la exposición al sumar el tercer pabellón y el espacio de amarres también ha subido de forma considerable al añadir un segundo muelle (La Fusta, para las embarcaciones a vela, y Espanya, para motor). En total, 1,8 kilómetros de recorrido lineal con cabida para 250 barcos de gran eslora, aunque como reconoce el director de la muestra al final serán unos 230.

Hasta estos momentos, en Port Vell hay unas 210 embarcaciones comprometidas para deleite de los aficionados que quieran comprar o simplemente mirar. Un año más el motor concentra buena parte del espacio, con unos 130 barcos, aunque aumenta el peso de la vela que cuenta con 57 embarcaciones. Y se podrán visitar otros 24 catamaranes, principalmente de vela, aunque también alguno de motor.

El Mangusta 130, de 40 metros de eslora, es el mayor barco que se verá en Port Vell

En consonancia con la tendencia de los últimos años de ir cada vez a mayores esloras, en Port Vell habrá barcos de muchos pies. Como curiosidad, apenas media docena de los contratados bajan de los diez metros de eslora y muchos pasan de los treinta metros. Es el caso del espectacular Wally, un velero de 35 metros, el Swan 100 de 30,21 metros y el Jongert 3400M de 34 metros. En motor, incluso, se llega a los cuarenta con el Mangusta 130 y sus imponentes 40 metros de eslora, aunque también hay otros nueve que superan los 30 metros, entre ellos el S.M. Italian Yachts con 38 metros o un Astondoa 122 de los astilleros españoles de alta gama con otros 37 metros.

Pero Barcelona no sólo se prodiga en eslora este año; los visitantes contemplarán numerosos modelos de reciente botadura. En el salón se realiza el lanzamiento mundial, el sábado 22 de octubre a las 14.00 horas, de la embarcación francesa Jeanneau Prestige 42 con la presencia de Vittorio Garroni.

No serán las únicas novedades, tanto en vela como en motor. Los astilleros italianos Azimut, que acuden a Barcelona de la mano de Hermanos Berga, su distribuidor español en exclusiva, exponen su gama completa, desde el Azimut 105 con sus 31 metros, y un precio algo superior a los 6 millones de euros, hasta el más pequeño, el 42 de 13,3 metros y un coste de 400.000 euros. Desde Hermanos Berga resaltan sus novedades, el Azimut 43F en una versión más deportiva y una segunda, que quizá no llegue a tiempo a Barcelona, el 62S.

Los gallegos de Rodman presentan su renovada gama R de pesca y en especial sus modelos 810, 1040 y 1170 y un nuevo modelo de la gama de cruceros, el 38 con motor ISP de Volvo Penta que monta hélices mirando hacia proa.

Menorquín Yachts exhibe cinco nuevas embarcaciones y los astilleros Bavaria, presentes exclusivamente en Port Vell y no en seco al igual que Azimut, traen como novedad el 275 Sport en motor y en vela, el 37 Cruiser. También hay sorpresas con los franceses Beneteau y Dufour. El primero, con su gama Cyclades, y el segundo, con el 325.

Actos en paralelo

La ciudad se convierte estos días en cita del mundo náutico. Por eso cada año la organización busca atraer, o crear, eventos relacionados con el mar. Y no sólo pensando en el aficionado, también en el profesional.Jordi Montserrat, director del salón, resalta el componente de negocio que cada vez más está adquiriendo. Este año se ha organizado, por parte del Xunta de Galicia, un encuentro sectorial entre empresas náuticas europeas y latinoamericanas. Además, numerosas empresas aprovechan esta semana para realizar encuentros y contactos comerciales. Por ejemplo, la fábrica sueca de motores Volvo Penta mantiene el lunes su reunión anual de agentes o el viernes se realiza la II Bolsa de contratación del turismo náutico.Pero no todo va a ser trabajo. Una de las atracciones es el Desafío Español que estará en Barcelona y un día -sin determinar aún- se presentará a la tripulación al completo. O se realizarán regatas en la Pro Am de Vela este fin de semana, se podrá visitar una exposición de fotografía submarina o pasarse por el stand de la Armada española.

Archivado En

_
_