Nortel ficha al presidente que revivió Motorola

Si un triatleta logró resucitar a Motorola y convertirla en una fuerte rival para el gigante Nokia, lo mismo puede suceder con Nortel. Al menos eso es lo que ha pensado la canadiense, que tiene la posición de primer fabricante norteamericano de equipos de telecomunicaciones, pero que debe remontar la mala imagen de sus escándalos contables.

La respuesta para Nortel ha estado en Mike Zafirovski, presidente de Motorola hasta enero de este mismo año. La renuncia de Zafirovski después de que no se le tuviera en cuenta para el puesto de consejero delegado pese a su contribución a la compañía ha sido una bendición para Nortel, muy necesitada de profesionales conocidos y respetados en el mercado.

Zafirovski será el máximo ejecutivo y también su presidente, y sustituirá en el puesto a Bill Owens. Este último, almirante retirado, no pondrá pegas a su relevo. De hecho, llegó hace 18 meses a la compañía para ayudar a restablecer unas cuentas que estaban erradas desde 1999 y siempre contó con que su cargo sería temporal.

Ahora llega el momento de recuperar la cuota de mercado perdida durante los meses de incertidumbre y escándalo. Le toca el turno Zafirovski, que aterriza con el encargo de repetir los éxitos de Motorola.