El Tribunal Supremo de EE UU bloquea una multa a las tabaqueras de 233.000 millones
El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha rechazado un recurso del Gobierno que solicitaba poder reclamar a la industria tabaquera el pago de 280.000 millones de dólares (unos 233.000 millones de euros) por un supuesto fraude al omitir los efectos del tabaco en la salud.
El máximo tribunal estadounidense rechaza así la petición del Departamento de Justicia, que solicitaba la revisión de una decisión del tribunal de apelaciones que, en febrero de este año, impidió al gobierno demandar a la industria tabaquera, a la que reclamaba parte de los beneficios obtenidos durante tres décadas. El tribunal de apelaciones dictaminó que la ley contra organizaciones corruptas y el crimen organizado (RICO en sus siglas en inglés) sólo permite imponer multas destinadas a impedir futuros delitos y no a obtener compensaciones por delitos cometidos en el pasado.
El caso contra las tabaqueras comenzó en 1999, cuando el Gobierno de Bill Clinton demandó a las compañías en virtud de una norma destinada a combatir el crimen organizado. En mayo de 2004, la juez de distrito, Gladys Kessler, concluyó que el Gobierno podía denunciar a la industria tabaquera para prevenir y contener futuras malas prácticas, esta decisión quedó revocada en febrero por el tribunal de apelaciones
La reclamación de 280.000 dólares forma parte de un caso más amplio, que actualmente analiza la juez Kessler, quien deberá dictaminar si las tabaqueras cometieron algún delito por omitir las posibles consecuencias de sus productos. Por este motivo, las empresas tabacalera consideraron precipitada la decisión de reclamar el pago de una multa al máximo tribunal y reclamaban esperar a que la juez Kessler emitiese su decisión.
Entre las compañías demandadas por el Gobierno estadounidense se encuentran Altria Group, propietaria de Philip Morris, British American Tobacco, R. J. Reynolds, Liggett Group y Lorillard Tobacco.
Tras conocerse la decisión de Tribunal Supremo estadounidense, el índice de acciones de tabaqueras de Dow Jones llegó a subir un 6,2%, impulsado por el ímpetu de Altria y Reynolds, que también lograron anotarse unas revalorizaciones superiores al 6%.