Tiempos dorados para la energía solar en Alemania
æpermil;ste está siendo un otoño dorado para las empresas alemanas de energía solar. No sólo por el excelente tiempo, sino también por la euforia que se ha despertado en la Bolsa germana en torno a estas compañías. Es el caso de Solarworld, Phönix Sonnenstrom, Sunways, Reinecke u. Pohl Sun Energie, Solon, SAG Solarstrom, Conergy, Solar-Fabrik, Centrosolar y Ersol. Todas ellas han registrado incrementos de cotización respecto al año anterior espectaculares que, en el caso de Solarworld, han llegado a ser de un 251%.
Las acciones solares están de moda. El elevado precio del petróleo y el programa de fomento estatal de energías renovables están poniendo la tecnología solar por las nubes. En Alemania, quienes optan por esta energía y cubren sus tejados con placas monocristalinas no sólo reciben subvenciones directas de las Administraciones públicas, sino que también pueden conectar sus instalaciones fotovoltaicas a la red y vender la energía eléctrica generada a su compañía eléctrica a un precio garantizado: 54,5 céntimos por kilovatio hora. Esta remuneración es tres veces superior al precio que paga el consumidor por esa misma prestación a las compañías eléctricas. De ahí la euforia bursátil por las firmas de tecnología solar.
Las acciones de Q-Cells, empresa de células solares que salió el 5 de octubre a Bolsa, registraron sólo en los primeros minutos de cotización una subida del 30%. Con una facturación de 117 millones de euros, Q-Cells tiene ahora un valor de 1.500 millones de euros. Con los 242 millones de euros recaudados en su primer día de cotización, Q-Cells quiere ampliar su producción y adquirir silicio, la escasa materia prima con la que se fabrican las placas solares.
A finales de septiembre salía otra empresa al parqué: Ersol. Este fabricante de Erfurt obtuvo un beneficio de emisión todavía superior al de Q-Cells. Antes, en marzo, la firma Conergy también tuvo un brillante debut en el mercado. Desde entonces ha registrado un incremento de cotización del 53%. Y el líder alemán, Solarworld, tampoco se queda atrás. Sus acciones dibujan un ascenso que recuerda a los mejores tiempos del nuevo mercado. En conjunto, el sector cuenta con un crecimiento anual del 30%.
El dilema es que estas renovables dependen de los incentivos públicos porque la energía solar no es todavía competitiva. Según Gerrit Rohleder, de la consultora Equinet, 'su éxito tiene que ver con los programas de fomento estatal en Alemania y, ahora también, en España'. Aunque la gran coalición entre democristianos y socialdemócratas no tenga intención de modificar la Ley de Energías Renovables, los expertos advierten que los inversores que apuesten por empresas como Ersol, Q-Cells y HCI no deberán quejarse cuando empiecen a perder dinero. La euforia en torno a las empresas de energía solar recuerda, en parte, a la histeria del año 2000 con las puntocom. Q-Cells subió el margen de precios drásticamente durante el plazo de suscripción. Y Ersol entró en el mercado bursátil con un curso que sólo podría justificarse con porcentajes de crecimiento espectaculares.
El mercado de las firmas solares crecerá. Pero los incentivos estatales, creados con la idea de reducir las emisiones de CO2 e impulsar la tecnología solar, se reducirán en el futuro. Y la demanda de esta energía dependerá de la evolución de los precios de otras fuentes renovables. Las empresas que no puedan cumplir los pronósticos sufrirán. Ya ha ocurrido con el sector de la energía eólica. Una de las empresas que despertó más expectativas, Umweltkontor, es insolvente. Y otras han caído bajo competidores que se han mantenido al margen de la Bolsa.