El Gobierno aprueba unos presupuestos donde destaca el papel del gasto social
El Consejo de Ministros ha aprobado hoy el Proyecto de Ley de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2006, que contemplan mayores dotaciones presupuestarias destinadas a gasto social, I+D, educación, seguridad ciudadana y ayuda oficial al desarrollo. Las cuentas del próximo año presentadas por el vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, prevén, por segundo año consecutivo, que las Administraciones Públicas terminen el ejercicio con superávit, en este caso, del 0,2% del PIB, una décima más que el estimado para este ejercicio.
Este objetivo es compatible, según el Gobierno, con un crecimiento del gasto del Estado del 7,6%, hasta los 133.947 millones de euros, y de unos ingresos que alcanzarán los 128.000 millones, un 9,2% más que en 2005, con lo que el Estado registrará el próximo año un déficit del 0,4% del PIB.
De los casi 134.000 millones de euros que el Estado gastará el próximo ejercicio, casi dos terceras partes están comprometidos de antemano. Se trata de las partidas destinadas a la financiación territorial, el pago de intereses, las contribuciones a la UE, las pensiones de las clases pasivas y el fondo de contingencia.
El tercio restante, es decir, en torno a 45.000 millones de euros, es lo que se reparte entre los departamentos ministeriales, que absorberán el 37,2% del gasto total. Al pago de la deuda pública se destinará el 13%, el Fondo de Contingencia absorberá otro 2% y los entes territoriales se quedarán con el 33,4% del gasto
Papel fundamental del gasto social
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, ha destacado que los Presupuestos tienen como objetivo la estabilidad presupuestaria, la mejora de la productividad y otorgan un papel "fundamental" al gasto social.
Solbes hizo estas consideraciones en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que aprobó la remisión a las Cortes del Proyecto de Ley de Presupuestos, elaborados sobre una previsión de crecimiento de la economía del 3,3% y la creación de 460.000 empleos.
Los presupuestos se centrarán en cinco grandes objetivos: el impulso de la productividad a través de la inversión en I+D+i, educación e infraestructuras; mejora de la protección social; aumento de la ayuda oficial al desarrollo; la sanidad y los servicios públicos de calidad.
Tarifa del IRPF deflactada
En materia de fiscalidad, el Gobierno no ha introducido ningún cambio relevante, salvo la deflactación de la tarifa del IRPF en un 2%, lo que supondrá un ahorro a los contribuyentes de 227 millones de euros, y la actualización también en un 2% de las tasas de cuantía fija, que reportará a las arcas públicas 59 millones de euros.
El Ejecutivo afirma que los Presupuestos de 2006 se enmarcan en un contexto de crecimiento económico "saneado y más equilibrado" que en 2005, ya que la demanda interna crecerá "algo menos" (4,2%) y también la aportación negativa del sector exterior será menor (-1,1%). Con todo, la evolución del PIB mantendrá la aceleración iniciada en 2004 y crecerá un 3,3%, casi el doble de la media de la zona euro.
Además, el Gobierno destaca que la inversión empresarial en bienes de equipo seguirá creciendo con fuerza, en torno al 7%, y que la economía española continuará siendo en 2006 la que más empleo cree dentro de la Eurozona, con más de 460.000 nuevos puestos de trabajo, lo que permitirá reducir la tasa de paro hasta el 9% de la población activa.