Los sindicatos de las filiales italianas exigen a su Gobierno que actúe
Los sindicatos mayoritarios de las filiales italiana y francesa de Endesa (Endesa Italia y Snet) manifestaron ayer en Madrid su 'rotundo rechazo' a la opa de Gas Natural contra la eléctrica. La declaración se realizó después del encuentro que mantuvieron los representantes sindicales con el presidente de Endesa, Manuel Pizarro, y el consejero delegado, Rafael Miranda.
Los sindicatos representados en la filial italiana calificaron la operación como 'un acto especulativo que prevé la desmembración de Endesa', según un comunicado remitido tras la reunión, comprometiendo, con ello, 'la integridad de Endesa Italia, su plan de inversiones y el desarrollo y el mantenimiento del empleo'.
Los representantes sindicales, además, pidieron la intervención del Gobierno italiano 'ante todos los actores involucrados', ya que consideran que estas operaciones 'desestabilizan el sistema y el mercado eléctrico italiano y ponen en duda las expectativas de desarrollo'.
Asimismo, piden que la Comisión Europea se involucre 'para impedir que, servicios estratégicos como el eléctrico, se vean envueltos en operaciones especulativas sin las garantías para los sectores industriales, el servicio público y el empleo', subrayaron en el comunicado.
En la misma línea, los sindicatos franceses CGT y Fnem-FO, presentes mayoritariamente en la filial francesa de Snet (incluso en su consejo de administración) denunciaron en otro comunicado 'las operaciones de recomposición accionarial en las empresas de generación francesas y su preocupación por el impacto que sobre los niveles salariales pudiera tener 'este tipo de maniobras político financieras realizadas en la opacidad más absoluta'.
Inquietud en las filiales europeas
En las filiales europeas de Endesa reina la preocupación por la opa. En el caso de Endesa Italia, el socio minoritario, Brescia, y los sindicatos se han opuesto a la intención de Gas Natural de repartir una empresa, de por sí pequeña, entre esta compañía e Iberdrola. En el caso de Snet, la tercera eléctrica francesa (estatal hasta la llegada de Endesa) que se ha ofrecido a Iberdrola, algunos analistas consideran que está siendo utilizada 'como moneda de cambio'.