España se vuelca en ayuda humanitaria urgente a EE UU
Gobierno central y comunidades autónomas enviarán con carácter urgente medicinas, alimentos, mantas y petróleo a las zonas afectadas por el huracán Katrina.
Las peticiones de ayuda humanitaria a otros países y una cierta planificación de los medios humanos y materiales comienzan a ser visibles tras el paso de Katrina.
La respuesta de los países de la UE no ha tardado en llegar. Bajo el mando del MIC, mecanismo europeo creado para gestionar las crisis, el titular español de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, se reunió ayer con el embajador de EE UU, Eduardo Aguirre, para estudiar una larga lista de necesidades. Entre las peticiones solicitadas se encuentran plantas potabilizadoras, generadores, camiones cisterna y material de campaña. Además de maquinaria de reconstrucción y equipos de limpieza para las zonas anegadas por el lodo. Hoy se hará publico el grueso de las ayudas destinadas por todas las administraciones públicas españolas. Ayer partió desde la Comunidad de Madrid un equipo de médicos forenses y sanitarios a la zona. Cataluña y Castilla y León preparan también sendas partidas, al igual que otros gobiernos regionales.
Otros 13 países de la UE, entre ellos Francia, Alemania, Italia y Reino Unido ya han enviado aviones con ayuda urgente. Además, Alemania y Japón liberarán parte de sus reservas de crudo, al igual que España.
Sin embargo, la ayuda para el desalojo y acomodo de los evacuados que llega desde el interior de EE UU sigue entrando a cuentagotas en la zona. El daño y la catástrofe humanitaria es 'de proporciones bíblicas' describe el diario The New Orleans Times-Picayune que ayer abría su primera página con un elocuente titular: 'Séptimo día de infierno'.
El infierno al que se refiere es al que se enfrentan la Guardia Nacional, los militares, policías y voluntarios que están participando de las labores de rescate y, sobre todo, en la búsqueda de muertos. Sigue sin haber una cifra oficial de bajas pero el alcalde de Nueva Orleans, Ray Nagin apuntaba ayer que podrían llegar a 10.000. Mientras tanto, la asunción de responsabilidades por la prevención y respuesta a la crisis del Katrina no está siendo clara. El Gobierno de George Bush, que sufre una inusual lluvia de críticas por parte de medios de comunicación, técnicos y políticos, está empezando a descargar la responsabilidad de lo ocurrido sobre las autoridades locales, cuando desde el terreno se echa la culpa a Washington. Ayer, el ex presidente Clinton dijo que sería apropiada una comisión de investigación como la del 11S.
Mientras, en Japón se espera que el tifón Nabi descargue su furia hoy sobre el suroeste del país.
Gasolina sin pago de impuestos
Poco a poco se van operando en Estados Unidos medidas económicas extraordinarias que ayuden a superar los efectos del huracán.Además de la rebaja excepcional de algunos criterios medioambientales para acelerar la producción en las refinerías de petróleo durante la crisis, los gobiernos de algunos Estados como el de Georgia han suprimido los impuestos sobre la gasolina durante un mes. Otros estados estudian hacerlo también. El objetivo es aligerar el alto precio del carburante en los últimos días (el doble que el año pasado en estas mismas fechas).Por otro lado, el Congreso está estudiando iniciativas legislativas a medio plazo para ampliar la oferta de crudo y gas natural de cara al futuro. Las propuestas pasan por la apertura de la costa del Refugio Natural del Ártico, en Alaska, para su exploración, o la concesión de un permiso de explotación en los Estados de la costa pacífica, atlántica y del Golfo. Mientras ello ocurre, el miedo a desabastecimiento aumenta. La compañía Chevron canceló ayer un pedido de 3.5 millones de barriles de crudo mexicano para su refinería en Pascagoula, Misisipí, por los daños causados por Katrina.